Iban de camino a casa de Stana y en la radio del coche escucharón que la única carretera que llevaba a casa de Nathan por un accidente, la carretera estaba rejada y era demasiado peligroso.
-¡Mierda!, ya no puedo ir a mi casa.
-Puedes quedarte en mi casa, si quieres.
-Stana, no creo que sea una buena idea. No quiero que pase como la ultima vez y terminemos sin hablarnos otra vez, eres una gran amiga para mi y no quiero perderte por una estupidez.
-¡Y no lo haras!- Dijo Stana interrumpiendole y muy alterada-Por que no pasará nada.
-¿Y eso como lo sabes? Soy un tio , no puedo prometer que bebiendo mucho y teniendo a una tía buena como tu a tiro no valla a intentar nada, seria un pecado hacerlo.
Esto produjo que Stana se riera.
-No pasara nada enserio, confía en mi. Además tendrás que hacerlo quieras o no porque no voy a permitir que duermas en un hotel teniendo mi casa ¿Vale?
Nathan asintió con la cabeza-Pero esta vez nada de alcohol, ¿Vale?
Stana sonrio.
***
Llegaron a casa de Stana y hacia un poco de frío. Nathan se sentó en una de las sillas de la isla de la cocina y Stana se quedo por la cocina.
-Quieres un...
-¡No!-Le interrumpió Nathan sin pensárselo-Quedamos que nada de alcohol.
-Iba a decir un café calentito, por el frío y eso. Pensé que como me iba a preparar un para mi te lo podía preparar a ti también. Pero si te pones así...-Dijo Stana con sarcasmo.
-Lo siento, perdona, claro que quiero, muchas gracias. Siempre y cuando no me lo vuelvas a tirar encima.-Bromeo Nathan, y los dos se rieron.
Mientras que se calentaban los cafés Stana se sentó en una silla al lado de Nathan.
-Hey, siento lo de la semana pasada.-Nathan la miro levantando una ceja.-Me refiero a no hablarte, era muy raro no se, siempre te e visto como mi compañero, incluso amigo, pero no como amante.
-Si bueno, no te preocupes, para mi también fue raro, así que te comprendo.-Nathan le guiño un ojo, y Stana sonrió.
-Aunque... No estuvo tan mal.-Dijo Stana bromeando y dándole golpes en el brazo.
Ambos empezaron a reírse a carcajadas.
-La verdad es que no estuvo nada mal.-Dijo Nathan en tono burlón.
Nathan se levanto de la silla y camino hacia el sofá.
-Me voy a dormir,¿Podrias darme una almohada y una manta por favor?
-¿Que haces? ¿No pretenderas dormir en el sofá verdad?-Nathan le miro confuso.-No pienso dejar que duermas en el sofá.
-¿Entonces, yo duermo en tu cama y tu en sofá? Gracias, pero no me parece justo.
-¡No! Me refiero a que durmas conmigo en mi cama.
-¡Que!-Dijo Nathan sorprendidisimo ante la repuesta de Stana.-No creo que sea buena idea.
-Nathan, nos emos acostado juntos, un poco tarde para tener vergüenza,¿No crees?
-Pero, Stana yo...
-¡No, ni lo pienses! Tu vas a dormir en una cama. Incluso si eso significa dormir conmigo en la mía,¿Te queda claro?
-Si, pero a veces das miedo¿Lo sabias?
Los dos se rieron ante el comentario.
***
-Bueno,¿Que lado de la cama prefieres?
-Me da igual, es tu cama me pondré al lado en el que tu no te pongas.
-Yo suelo dormir en el derecho, pero la verdad es que me suelo mover por las noches y casi siempre termino durmiendo en el izquierdo. Pero el derecho.
-Vale entonces yo me pondré en el izquierdo.-Dijo Nathan mientras iba al lado izquierdo de la cama y Stana se metía en el derecho.
-Bueno, buenas noches-Dijo Stana acercándose para darle un beso en la mejilla, Nathan hizo lo mismo que Stana, lo cual provoco que se dieran un beso en los labios.
-Perdón, lo siento, lo siento mucho¿Estas bien?
-Si, tranquilo tampoco a sido para tanto, nos tenemos que besar siempre en las escenas, considerarlo como un ensayo.
Los dos se rieron, apagaron la luz y se durmieron.
Stana se levanto para cojer un vaso de agua.
-¿Que haces?-Dijo Nathan.
Stana pego un salto del susto y casi se le cae la botella, cuando vio que estaba sonámbulo.
-Tenia un poco de sed y me levante a por un vaso de agua. ¿Por que no te vuelves a la cama?
-Te tengo que decir algo.
-Bien, cuéntamelo.
-Te quiero, te quiero desde el otro dia, tus besos fuera de cámara fueron asombrosos y no pude evitar no enamorarme de ti, pero al ver que te hizo daño decidí no decirtelo, no quería hacete daño, lo siento mucho.
-He no, tranquilo no pasa nada, no me hiciste daño, solo que fue muy repentino yo no estaba preparada, me sorprendió, solo eso.-Dijo Stana abrazándolo.
Stana recojio el vaso y la botella de agua y dirigió a Nathan a la cama, los dos se durmieron.
