Para mi amigo, yo

39 1 0
                                    

Y, ¿qué pasó con lo que llamabas felicidad?
¿Acaso fue efímero como el humo?
Pensaste que siendo sincero podrías ganar,
Pero te condenaste a la soledad solo con hablar,
Y no puedes negarte a aceptar la realidad,
Sabías bien que esto podría llegar a pasar.

Pudiste haber hecho cosas buenas,
Pero no te engañes, no te mientas,
no eres lo que piensas,
No eres lo que los demás piensan,
Te convertiste en piedra oscura,
Desearía que fueras como antes.

¿Ahora qué vas hacer? ¿Qué?
Quieres engañarte que estás bien,
En realidad no vives siendo tú,
Vives en la vida de quien quieres,
De quien amas pero no te quiere,
Vives sin ser tu mismo, querido amigo.

Simple poesía de una alma rotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora