Back in Time (K.S.J Fanfic)

15. Miss Right

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Mayo 26 del 2013

Con un último vistazo y después de algo más de tres horas, Alicia supo que finalmente el lugar estaba listo, esta nueva experiencia de vivir sola y tener tiempo para si misma, le había enseñado que conservar el lugar en el que vivía limpio y en condiciones óptimas era sinónimo de vida sana y la vida sana, pensaba ella, sería su nueva consigna una vez volviera a su presente, nada de sacrificar su salud física y mental persiguiendo un sueño que (gracias a años de trabajo duro) ya estaba a la vuelta de la esquina. A partir de ahora se dedicaría a la difícil tarea de quererse a si misma, se tendría paciencia, no se condenaría por sus desaciertos y priorizaría pasar tiempo con las personas que quería, de hecho y a ese punto la chica tenia planes de visitar a su familia usando un dinero que venia ahorrando desde hacía un buen tiempo y que sería suficiente para cubrir los gastos del viaje.

Miró su teléfono esperando encontrar mensajes de cierto alguien que no se había comunicado con ella desde hacia varias horas, decepcionada dejó el aparato a un lado al comprobar que no había nada en su bandeja de entrada. A escasos días del tan esperado debut, las horas de ensayo para los recién conformados Bulletproof Boy Scouts habían aumentado, pasando de dieciséis a dieciocho y hasta veinte horas diarias cuando la ocasión lo requería.

La última vez que tuvo la oportunidad de verlo fue el sábado 18 de mayo, para ese día el chico se presentó con pollo (frito para ella y al vapor para él) y bebidas (cerveza para ella y agua con gas para él) su cabello era castaño oscuro con tintes rojizos y estaba peinado de una manera extraña, una capa de maquillaje decoraba su rostro, cubriendo (sin mucho éxito) unas notables sombras negras ubicadas bajo unos ojos que reflejaban el cansancio de horas de privación del sueño, estaba notablemente más delgado, pero su cuerpo se veía más atlético y sus brazos eran firmes. Para ese día el grupo había tenido la sesión de fotos grupales e individuales para la promoción de su debut y aunque nunca lo dijo en voz alta, sabía que una foto no podía capturar la verdadera belleza del hombre que tenía al frente.

Naturalmente no podía evitar sentirse celosa, miles de chicas (hermosas chicas) al rededor del mundo lo amarían y le guardarían absoluta devoción. Pero por ahora, en ese presente distorsionado que le había tocado vivir, era ella quien llevaba la delantera, era ella la única (fuera de su madre) quien lo había visto en sus momentos de felicidad, tristeza, timidez, decepción y enojo.

Y de acuerdo a lo que su intuición le indicaba, era la primera que había logrado ganarse un lugar en su corazón, no ARMYS, no Seokjinnies, no fans, ella y nadie más que ella era quien albergaba tan maravilloso privilegio. No pretendía ser egoísta ni mucho menos posesiva, lo único que quería era disfrutar su pequeño momento de gozo antes de que las adorables chicas armadas entraran en escena directo a robar su corazón y su tiempo ¿Estaba celosa? Claro que estaba celosa, esas chicas harían parte de su futuro, mientras que ella solo se convertiría en un recuerdo lejano, alguien que un día fue, pero que ahora no es, el simple vestigio del primer amor.

Esa noche del 18 ambos compartieron una agradable cena, empañada por el evidente malestar de Alicia al no ver comer apropiadamente a su compañero, no quiso mencionarlo, pero le molestó la actitud que la empresa estaba tomando frente a esta situación, no es como si estuviesen tratando con un objeto o un pedazo de carne del que se dispone como se desea, se trataba un ser humano quien ya tenía suficiente lidiando con la presión de no sentirse lo suficientemente capacitado para debutar en un grupo cuyos miembros lo rebosaban en experiencia y de acuerdo a su propia (y errada percepción) también en talento.

Después de la cena y mientras ella lavaba los platos el chico le pidió permiso de recostarse un rato sobre su cama, para (según él) reposar un poco la comida, cuando Alicia entró a la habitación lo encontró profundamente dormido, su rostro lucía agotado, pero su expresión era tan serena que con agrado notó como una pequeña sonrisa se dibujaba en esos bellos labios, sin hacer mucho ruido busco en la parte superior del armario una manta y lo arropó con toda la delicadeza que le fue posible, en el momento justo en que dio la vuelta para retirarse, sintió una mano cerrarse sobre la suya, lo siguiente que supo es que estaba siendo atraída hacía la cama para quedar de espaldas a la posición donde estaba él.