El primer día de trabajo se puede considerar como el primer día de clases ¿No? Sentir el estómago revuelto por las ansias y nervios, aunque en realidad no era mi caso, mi estómago estaba exigiendo sus sagrados alimentos, desperté 6:30 tenía 30 minutos en los cuales tenía que bañarme, pintarme, vestirme, peinarme ir a la empresa, la cual estaba a 15 minutos caminando.
Realmente tuve que tomar dinero de la luz para tomar un taxi mientras cepillaba mi cabello café e intentaba pintarme sin manchar el auto ni mi traje color marrón. Realmente tome lo primero que vi y resultó ser un traje marrón con líneas blancas, el cual odiaba porque me hacía lucir gorda y simplemente el color no me gustaba.
Llegué a la empresa 7:07 y fui directo a tomarme la fotografía para mí Carnet, agradecí internamente que cuando llegue el encargado estaba en el baño, cuando salió y me vio se disculpo y se apuro más de lo normal lo cual agradecí.Cuando estuvo listo subí inmediatamente al piso en donde mi jefe llegaría en 15 minutos, cuando salí del elevador el chico del día anterior estaba tomando un café en su pequeña oficina.
-Llegas tarde, aún tienes que ir por el café y checar la agenda para que cuando llegue le digas todo su itinerario- dicho esto dio un buen trago a su café.
-El café está en ese cuarto , yo que tú empezaría dejando todo eso que traes y me apresuraría, no tarda en llegar, iré por allá - sin más se levantó y fue hacia el elevador.
Decidí ignorarlo y dejar mi saco y bolso en el pequeño escritorio que el en el día de ayer vi que no estaba ocupado por aquel hombre. Después de eso, gire y me sorprendí al ver que lo que nos separaba de la "Cafetería" era solamente una pared de vidrio con unas líneas del color de nuestras sillas, me adentre en el pequeño cuarto, tenía unos estantes del lado izquierdo donde había diferentes tipos de café instantáneo, había una pequeña barra donde estaban dos cafeteras, una era del café expreso y la otra supuse era para el café de sabor, a su lado un lavabo y en la parte de arriba había un mueble de madera donde estaban las tazas del café y al final un pequeño refrí.
Me impresione un poco porque todo eso se veía realmente caro y tenía miedo de romperlo o dañarlo, eran esas cosas que hasta con solo mirarlas temes por ensuciarlas.
Agite mi cabeza para intentar alejar esos pensamientos y me dispuse a hacer el café. Después de tres minutos el café estaba listo, lo tome con cuidado con ambas manos y con pasos lentos camine hasta la oficina para dejarlo en el escritorio de mi jefe.
Después de eso encendí la computadora que tenía en mi escritorio, después de que iniciara y enterará al correo que me habían otorgado mi primer e-mail llegó, era el itinerario, comencé a leerlo y a transcribirlo en una agenda que encontré en unos de los cajones, era buena memorizando cosas si las escribía.
Casi al finalizar el timbre del elevador me hizo alzar la cabeza, era el. Ahora venía vestido con un traje gris y una camisa blanca con una corbata rosa pastel, no sabía que esos colores combinaban, aunque en el se veía realmente bien.
Me levanté casi inmediatamente y cuando estuvo lo suficientemente cerca lo saludé
-Buenos días señor-
- Ya está mi café ¿Cierto?- y sin más entro a su oficina.
Un buenos días a nadie le cuesta, pero al parecer hay personas que si.
Mordí mi mejilla internamente y entre a la oficina con la agenda de hace rato.
Al entrar vi como se quitaba su saco y lo dejaba en un perchero, seguido se sentó en su sillón giratorio, al momento de probar su café hizo una mueca y lo volvió a dejar.
-Y bien ¿Qué pendientes tengo este día señora Holt Guest?
-Oh bueno, en realidad solo tiene una reunión a las 11 a.m, terminando esto tiene que ir al departamento de diseño gráfico para aprobar el último boceto de la publicidad del hotel de California. En la tarde tiene otra junta con el corporativo de la empresa vecina y en la noche tiene un cita con su padre señor- alcé mi vista cuando termine de leer sus deberes. Lo sorprendí viéndome de arriba hacia abajo, aunque a pesar de que carraspee para anunciarle que ya había terminado, al igual de que era una indirecta para que dejara de mirarme.
-Las líneas horizontales la hacen ver más rellena de lo que es. El color café está bien pero las líneas no me gustan.- terminando de eso jalo un poco los puños de su camisa de mangas - es todo puedes retirarte
- Claro- me límite a asentir la cabeza y salir de ahí.
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El Mandon De Mi Jefe (Editando)
RomanceA todos nos han roto el corazón, de una u otra forma, pero en la mayoría de los casos esto no nos impide volver amar. Al principio asociamos a nuestro corazón roto con la mala suerte, mal juicio para escoger a las personas o incluso, la madurez de e...