Rencor y venganza (No confíes en nadie, todos saben mentir)

Rencor parte 4 Juliana

No sé qué necesidad tenía Martina de contar a la policía lo que me pasó con Valerie. ¿No se le pasó por la cabeza que eso me haría quedar como sospechosa? No tiene ninguna importancia en la investigación lo que pasó entre ella y yo. No iba a matarla por eso. No tiene ningún sentido que se lo contara a policía.

-Juliana, tienes que ser sincera, Martina ya nos contó que tuviste un problema con Valerie. ¿Qué pasó exactamente? - estaba muy atento a mi respuesta.

-No entiendo que tiene que ver lo que pasó con su muerte. ¿Te parezco sospechosa? -dije de forma maleducada e incluso un poco burlesca.

Como cagarla en un paso. Pero es que estaba furiosa. Si Martina se hubiera callado la boca no estaría ahí. Yo no tenía que estar ahí.

-Entiendo que pienses que no tiene nada que ver, pero cada detalle importa y es imprescindible para la investigación-intentó tranquilizarme, él notaba que estaba nerviosa.

-Vale. Pues, em... a ver, pasó hace unos cuatro años. Valerie estaba en segundo de bachillerato y me gustaba. Sin más. Estaba enamorada de ella. Yo no sabía que ella tenía novio, Martina no me lo contó, supongo que para no hacerme daño porque ella sabía lo que yo sentía por su hermana. Valerie y yo nos conocíamos desde hacía muchos años porque como su hermana es mi mejor amiga nuestras familias siempre hacían muchos planes juntas. Pero ella nunca me habló de Liam. Cuando Val cumplió los dieciocho me invitó a su cumpleaños, era en un local. Y bueno, como es de esperar había alcohol y bebí, aunque era menor de edad. Valerie no sabía nada de lo que yo sentía por ella, y como ya iba borracha quise decírselo, era la única manera en la que me atrevía a confesárselo. Le pedí que viniera conmigo a algún lugar "tranquilo" para hablar. Ella me dijo que vale y fuimos al cuarto ese donde dejamos las chaquetas y eso. Me puse tan nerviosa que no sabía como decírselo. Creí que estaba lista para hacerlo, pero no, no lo estaba. Empecé a temblar y rompí a llorar. La verdad, no sé qué debió pensar ella en ese momento, la verdad es que pensé que se iría y que me dejaría ahí, estaba haciendo el ridículo, aunque solo estuviéramos ella y yo, pero me abrazó. Y yo... no me lo pensé dos veces y cometí uno de los mayores errores de mi vida. La besé. - en ese momento me puse a llorar recordando a Valerie y lo que nos había pasado.

-Vale,  está bien que nos hayas contado esto.  Ahora tomate un descanso, respira y cuando estés lista sigue explicando la historia. -dijo con un tono relajado.

Me sentía tan idiota por lo que pasó aquel día. Tendría que habérmelo imaginado. No el hecho de que tuviera novio. Si no el hecho de que ella no querría estar conmigo. Ella era mayor de edad y yo solo tenía quince. Quizás no hay tanta diferencia, pero yo era menor y ella no querría meterse en ningún tipo de problema. Además, me conocía desde hacía muchos años y tenía razón, éramos como hermanas. Pero no supo cómo decirlo y por eso me di cuenta de que no era tan maravillosa como me creía, incluso en ese momento Valerie me dejó de caer bien. Y no es que gestionara mal el rechazo. Es que me rompió el corazón y fue cruel conmigo.

-Bueno, ¿por dónde iba? Ah, la besé. Ella me empujo y me miró mal. Me dijo que estaba borracha y que se me había ido la olla. Me quedé flipando con que reaccionara así. Tampoco tenía porque ser así de mala conmigo. Yo me disculpé y le dije que no sabía por qué lo había hecho. Sabes, es injusto. No se vale, no tengo por qué disculparme por querer a alguien. Y vale, la besé sin permiso, pero lo hice porque lo sentía y ella se limitó a dejarme de loca. Podría simplemente haberme dicho que ella no sentía lo mismo o yo qué sé. No volvió a hablarme en toda la fiesta, ni me miró. De hecho, desde entonces casi no hemos hablado y el tema no lo hemos ni tocado. Creo que ella prefirió olvidar lo que pasó. Nunca me dijo nada al respeto ni siquiera se disculpó por tratarme mal. Y no es que fuera homófoba ni nada por el estilo. Supongo que no se lo esperaba y no supo reaccionar bien. Pero podría haberse disculpado como mínimo por empujarme. Yo me disculpé por besarla.