Mi novio no-vivo

Abajo

Anthony caminaba apresuradamente por la ciudad casi corriendo y tropezándose con los transeúntes que apurados de igual manera se movían de un lugar a otro en la agitada ciudad, necesitaba estar solo quería estar solo al igual manera quería destruirlo todo después no quería sentir absolutamente nada.

–Déjame en paz, Alastor. Solamente quiero estar solo –menciono deteniéndose y encarado al demonio de la radio quien tenso su sonrisa –

–Mon cher, sé que dejarte solo sería un total descuido de mi parte en tu estado actual.

– ¡No soy un jodido niño, Alastor! ¡Cómo para que tengas que andar haciéndote de mí niñera!

–Eso ya lo sé.

–Deja de molestarme y déjame solo ¿O acaso esto es divertido para ti? ¿Eh? ¿Es entretenido verme sufrir? ¿Verme destrozado? –las lágrimas comenzaban a correr por sus ojos Alastor se sintió disgustado por sus palabras tomó del cuello a Anthony y lo arrastro por uno de los callejones golpeando contra una de las paredes, Anthony se sintió mareado por el golpe sus ojos pasaron a enfocarse en Alastor pero sus ojos estaban brillando en un rojo amenazante por primera vez luego de cinco años volvía a sentir miedo de Alastor –

–Escúchame bien, Ángel porque solo lo diré una vez ¿entendido? –Anthony asintió para que las manos de Alastor dejaran de estar en su cuello y pasaran a su barbilla – Tu dolor no me entretiene nunca lo ha hecho quisiera poder hacerte feliz pero regresar a un ser vivo está fuera de mis límites y no puedo ¡pero créeme que me gustaría! Te amo y me importas, eres el único ser humano luego de mi madre que me ha importado y no dejaré que te auto-sabotees ¿He sido lo bastante claro? –Anthony asintió para que Alastor lo soltara –

– ¿por qué ella tenía que morir, Alastor? No es justo.

–Mon ange, la muerte es algo totalmente natural y se debe aceptar.

–Pero ya no la veré más y eso me entristece quiero destruirlo todo pero no quiero sentir nada.

–Si quieres podemos hacer una masacre juntos pero no voy a permitir que te drogues –Alastor se cruzó de brazos –

–lo de la masacre suena divertido, supongo.

– ¿por qué no hablas con Molly? Creo que tu hermana podría entenderte mejor yo no soy bueno para expresar sobre los sentimientos.

– ¡pero como pude olvidarme de ella! Debe estar igual o peor que yo –Con aquello regreso su tarea de moverse para ir hacia lo que llamo alguna vez hogar –

Cuando Anthony regreso a lo que era su antigua casa Molly estaba bastante mal por la pérdida de su figura materna por lo tanto tuvo que cambiar todo su dolor para poder ser el pilar que sostuviera a su hermana en aquella perdida que le dolía a ambos con el tiempo logro calmar a Molly preparándole un té luego su hermana le pidió un tiempo a solas y decidido bajar de su habitación hacia la sala en donde estaba Alastor.

–Al –murmuro para sentarse en el otro sofá lejos de Alastor lo cual era extraño usualmente Anthony era muy fanático del tacto pero suponía que el chico necesitaba su espacio – ¿Alguna vez superas al muerte de un ser querido?

–Nunca –Contestó –pero con el tiempo aprendes a sobrellevarlo.

–Gracias, siempre soy feliz con tu honestidad –mascullo mirando hacia otro lado –

– ¿Querías que te mintiera? No, mon cher, no te mentiré no es fácil, siempre estará su recuerdo en tu mente pero con los años aprendes a mantener el recuerdo y los momentos felices que pasaron juntos esos momentos se vuelve valioso y lo más importante que te quedara.

– ¿Y si no quiero quedarme solo con los recuerdos?

–Nadie vive para siempre, querido. La muerte es inevitable y necesitas familiarizarte con ella, las casusas todo el tiempo pero también debes saber que personas importantes para ti se deberán ir tarde o temprano. –Anthony sabía que Alastor tenía razón pero eso no hacía que doliera menos –

– ¿Cuándo dejará de doler?

–Eso depende de cada persona, mon ange.

– ¿A ti todavía te duele el asesinato de tu madre? –Alastor hizo una mueca sabía que Anthony no lo decía con malicia pero ese era un tema que no le gustaba hablar –

–Me familiarice con ella como viejos amigos.

–pero ¿Ha dejado de doler?

–No, a veces no.

Anthony guardo silencio para luego suspirar una lágrima bajo por su mejilla para que luego corrieran más dolía bastante realmente y quería dejar de sentir de sentir ese dolor, las drogas eran algo sumamente fácil que le harían no sentir nada pero sabía que Alastor era como un perro guardián y su sombra mucho peor no lo dejaría tomar ni un solo gramo, Alastor se sentó al lado de Anthony en el sofá grande y tomó su mano.

–Si quieres puedes apoyarte en mí –Anthony sonrió levemente para apretar la mano que lo sujetaba y lentamente apoyo su cabeza en el hombro de Alastor –

Bien todo se venía abajo en ese momento pero al menos aun contaba con su apoyo no estaba solo.

La canción no tiene absolutamente nada que ver pero me gusto y procedo a dejarla.

Colorín colorado este cuento se a acabado y son las tres de la mañana y yo sigo oyendo ruidos raros

(no es una rima de verdad ando oyendo ruidos raros)

Para lo que me leen de noche que descanse para lo que lo hicieron de día que tengan buenos días, para lo que lo hacen en la tarde ¡Guten Tag! 

Adiós ;D