A DEEPER CONNECTION: THE PHILOSOPHER'S STONE

Flying and Duels

Harry volvió a la sala común de los Slytherin media hora después. Le había llevado un poco más de tiempo volver a las mazmorras porque tuvo que escabullirse en algunas salones varias veces para sofocar su risa. Tanto Harry como Tom estaban de excelente humor. Tom estaba orgulloso de la actuación de Harry, habían interpretado bien a Dumbledore. Al manipulador amante de las cabras se le había presentado una imagen totalmente diferente y mayormente equivocada de su chico de oro y probablemente estaba ocupado pensando por qué sus Compulsiones no habían funcionado. Probablemente llegaría a la conclusión de que no habían funcionado porque Harry no dudaba de su elección de casa y estaba feliz y contento allí, lo que podría ser el caso de las compulsiones más ligeras. Si iban totalmente en contra de la personalidad de alguien o de sus deseos, serían nulos. Dumbledore probablemente dejaría de intentar cambiar la casa de Harry y buscaría otras formas de manipularlo. No asumiría que las Compulsiones no se habían afianzado debido al anillo de herencia de Potter que tenía desilusionado o que Harry realmente había sentido el intento de manipulación. Tom no podía esperar hasta que el viejo amante de las cabras viera la verdadera cara de Harry. Pero faltaba mucho tiempo para eso. Los recuerdos del té con el director y su expresión cuando el pantano reapareciera servirían por ahora.

Harry entró en la sala común y se unió a sus compañeros de año que estaban haciendo sus deberes frente a la enorme chimenea de mármol. No pudo evitar notar lo emocionados que estaban la mayoría de ellos, excepto en Neville, "¿Me he perdido algo?".

Blaise resopló, "¿Me perdí algo?, pregunta," sus ojos brillando en la diversión, "por supuesto, lo hiciste. ¡Algo realmente grande! Tan grande, de hecho, que el querido Draco no ha logrado completar ni una sola frase desde que lo anunciaron hace casi una hora."

"¡Pero son lecciones de vuelo, Blaise!" el rubio heredero de Malfoy se quejó en protesta, señalando hacia el tablón de anuncios negro, "¡vamos! ¡Admítelo! ¡Todos hemos estado esperando el anuncio! Y ahora, finalmente está aquí!".

Eso explicaba la emoción entre sus compañeros y también despertó la curiosidad de Harry: "¿Cuándo se da la primera lección?".

"El jueves después de Encantamientos", respondió Neville, aunque parecía bastante nervioso ante la perspectiva de volar. Parecía que tenía que hablar con el chico tímido antes de la lección de vuelo.

"El único inconveniente es que compartiremos las lecciones con los Gryffindor's una vez más", escupió Theo mientras las chicas asentían con la cabeza, "¿qué intenta el director con esto? ¿Está tratando de alimentar aún más la rivalidad entre nosotros y los leones?".

" Por supuesto que sí", dijo Harry, poniendo los ojos en blanco. El resto de sus compañeros de año le miraron de repente. ¿Cómo pudo el chico de oro de Dumbledore decir algo así? Pero no era el chico de oro de nadie. Bueno, tal vez de Tom. Pero Tom odiaba los colores brillantes y llamativos. Quizá debería pensar en otro nombre.

El jueves por la tarde, los Slytherin's de primer año bajaron las escaleras para su primera lección de vuelo. La semana se había prolongado hasta ese momento. No había pasado mucho. En Transfiguración, la mayoría de los estudiantes aún luchaban por convertir su fósforo en una aguja. Binns seguía hablando de las Guerras de los Goblins. Quirrell seguía siendo un desastre tartamudo. La Herbología era todavía un poco interesante. Harry pasaba la mayoría de sus lecciones haciendo sus deberes, ayudando a Draco y Neville, leyendo sus libros más bien oscuros, o conversando con Tom. La única desviación había sido Pociones el miércoles, donde Severus una vez más había restado puntos a Gryffindor por el ensayo abismal de Weasley. Pociones era sin duda su clase favorita.

Encantamientos, por otro lado, no lo era. Flitwick todavía los tenía practicando la pronunciación del Encanto de Levitación mientras les daba una conferencia sobre la teoría detrás del encanto. Hasta cierto punto, Harry podía apreciar los métodos de enseñanza del medio goblin, ya que profesores como McGonagall no se molestaron en explicar la teoría. En cambio, esperaba que se auto-estudiaran la teoría mágica. Esto no era un problema para Harry, pero para muchos otros sí lo era. Además de eso, condujo a un gran número de accidentes. Seamus Finnegan, por ejemplo, se las arregló para hacer explotar su cerilla. Los métodos de enseñanza de Flitwick eran mucho más seguros, pero a veces parecían prolongarse. Harry se preguntaba si realizarían los Encantamientos de Levitación antes de Halloween.