El sutil tararear de Todoroki llama su atención al igual de como mueve su cabeza de un lado a otro por escuchar la música en su audífonos, en ocasiones frunce el ceño y la nariz al leer los problemas matemáticos escritos en su cuaderno pero inmediatamente cambia de expresión porque sabe resolverlos con velocidad.
Lo observa trazar las palabras con agilidad y se atrevería a decir elegancia, su letra es bonita y organizada en cada sección. Mira sus apuntes que parecen un chiste a comparación de los de su novio, no tiene letra fea pero si es sobrepasado aunque le cueste admitirlo.
Se regaña al no poner atención a su estudio, tiene que ser el mejor, tener la nota más alta, ganarle a todos.
—Terminé.
Casi se cae cuando escucho esa palabra, ¿Se distrajo tanto en el otro que perdió tiempo?
No, observar a Shoto no es perder tiempo. Suelta un gruñido y se enfoca por fin en sus deberes.
—Voy a la cocina ¿Te traigo algo? —la voz del bicolor se escucha de nuevo.
—No.
Shoto no le resulta extraño esa corta y seca respuesta, se acostumbro al rubio empalagoso, tierno, amable pero también al cortante, impaciente, explosivo, impulsivo.
Se levanta del tatami de su habitación para después salir y tomar el ascensor.
Saliendo se encuentra con su par de amigos—Iida y Uraraka —junto a Midoriya estudiando en los sofás de la sala de estar, trata de hacer el menor de los ruidos pasando desapercibido pero no lo logra, su mirada conecta con el peli-verde.
Su corazón late rápido y quiere escapar. Por educación le saluda con la mano, llega al refrigerador toma un botella de agua y aunque le duela no le apetece regresar con Katsuki, quiere tomar un respiro fuera de los dormitorios.
Correr alrededor y pensar con más tranquilidad sin interrupciones le es de su agrado acatado lo más rápido posible esa idea. Saca su teléfono mandando un mensaje a su novio diciendo que saldrá a correr, evitando los mensajes llenos de interrogantes.
Afuera estira su cuerpo desde cabeza a pies, no quiere una lesión. Toca con las yemas de los dedos sus zapatos terminando su calentamiento comenzando a correr.
Los pensamientos va de poco en poco, su vida es como una montaña rusa de emoción que es inestable, que se direcciona al azar guiada con su corazón.
No es la misma persona que hace uno meses, el cambio fue favorable junto a su alrededor. No siente que se asfixia como antes porque tiene a su soporte principal llamado Bakugo Katsuki, quien lo abraza y consuela con devoción.
Su vida está segura con el rubio a su lado.
Recuerda que cuando Izuku lo humilló fue su novio quien lo consoló haciendo saber que no era culpable de absolutamente nada. No lloró porque su orgullo era más grande, sin embargo estuvo más de una ocasión tentado a hacerlo.
Con Shinso y Monoma también fue apoyado—los detuvo en el intento de asesinato contra Midoriya—recibiendo pequeñas pero significativas muestras de afecto. No lo decía pero adoraba ser consentido.
Sus familias estaba enterada de su relación desde no hace mucho. Fue peculiar como reaccionaron.
Fuyumi los felicito con alegría, Natsuo les deseo lo mejor y Touya...
Fue incómodo.
Su hermano mayor les dió una plática de lo que deben evitar como pareja, desde los celos, infidelidades y faltas de respeto. Está ese momento todo bien pero el albino apenas estaba comenzando.
Se puso serio y amenazó a Katsuki con que si lo llegaba a lastimar no miraría el amanecer del siguiente día.
La parte más importante e incómoda fue cuando les hablo del sexo entre hombres, la vergüenza era mucha pero era información para el futuro.
Shoto es consiente que será el de 'abajo'. No tiene idea de cómo lo sabe, esa es su realidad simplemente.
Deja aún lado esos pensamientos para abrir paso a otros.
La familia Bakugo ya lo esperaba, era muy bien recibido y querido. Su suegra siempre buscaba molestar a su hijo abrazándolo o acaparando su atención, al menos hasta que el rubio explotaba y lo abrazaba con posesión soltando casi gruñidos.
Tierno y salvaje.
Sonrío soltando un suspiro.
El tiempo transcurre demaciado rápido, ya estaba por ingresar a su último año de preparatoria, extrañaría a sus amigos y compañeros.
La vida no se detiene, recuerda de un instante a otro al estar de regreso y en la puerta su pareja le sonríe extendiendo sus brazos esperando su cuerpo.
El corazón late sin parar.
Sus pasos terminan para iniciar una carrera. Al llegar es rodeado por los fuertes brazos de Katsuki.
—He terminado de correr, lo último que tienes que hacer es tocarme. Necesito un baño.
—Igual necesito uno. —le sonríe con superioridad.
No lo retiene, da una carcajada que es escuchada como si fuera el sonido más perfecto del mundo.
—Vamos, necesitas un baño, ir a cenar y dormir.
—Apenas son las 6:25 p.m ¿No es muy temprano?
Él de ojos rojos frunce su ceño mirando con desaprobación.
—Dormiras a las 8 y ni me contestes. No está a discusión.
Siente los brazos de su chico soltarlo un momento para cargando estilo nupcial valiendole las miradas curiosas de sus compañeros al entrar.
La vergüenza invade su cuerpo otra vez. —¡Bájame Bakugo!
Katsuki lo ignora y se ríe.
Bueno, al menos está seguro con él.
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.Gracias por leer<3
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El bastardo es mio [Bakutodo]
ФанфикNo es gay, no es gay, no es gay... Bueno solo lo vuelve gay una persona: Todoroki Shoto. Bakugo no puede despegar su mirada del bicolor, así como tampoco pueden evitarlo Deku, Inasa y Momo. -Soy bisexual. -Así de simple lo había dicho Shoto. Esas d...