Durante las noches solía hacer las paces consigo mismo, pues despertaba animado.
La imagen del castaño encima suyo lo hacia delirar todas las noches, mientras tomaba sus caderas mientras repetía una y otra vez que lo amaba, sintiendo sus cuerpos empapados en sudor, apretando con fuerza haciéndolo llorar por lo bien que se sentía.
Por lo general la pasaba mal durante varios días pensando en sus errores qué, hasta que no se secara hasta la última gota de amargura, no los dejaba ir. Al abrir sus orbes celestes lo primero en lo qué pensó fue en Billy y eso le gustó.
Al despertar algo sabía bien: Los sueños húmedos con Billy le gustaban pero no iba a masturbarse con sus padres en casa así que se decidió por ducharse con agua fría. Qué descuidado había sido por varias noches mencionando el nombre del castaño durante sus sueños lúcidos.
Siempre dormía hasta tarde pero esa noche no fue la excepción que tenía "sueños húmedos" con Billy.Quería disfrutarlo de todas las formas posibles.
Se puso de pie y se preparó para él día. Sólo quería verlo y pensó alegre en el día que le esperaba mirándolo.
Junto a él y las bromas tontas de Malcolm, le había comenzado a gustar la aburrida rutina.Se sintió tan confiado que al estar listo fue escaleras abajo hacía la cocina dónde seguramente se encontrarían sus padres tomando el té.
Su recibimiento le terminó de levantar el ánimo.
Habían dejado el pasado atrás y volvieron a ser ellos, la señora Heelshire: Conversadora; su padre y él, cómo siempre, escuchando alegres en silencio. Era raro, pero no sentía necesidad de fingir lo que no era frente a sus padres. Ya no más.Con los otros sus miedos siempre estaban al acecho junto a aquel feo sentimiento de sentirse solo. Últimamente no había podido librarse de ese sentimiento: su gusto por los varones y de vez en cuándo la atención qué una chica le provocaba.
Su madre lo comprendió y apoyó cómo una madre debe de apoyar a sus retoños, pero su padre era otro dilema. La última vez había encontrado varios escritos firmados por su único hijo, esas palabras, poemas, fantasías, confesiones y demás estaban dedicadas hacia un tal "Billy".
- "¿¡Quién carajos es Billy, Brahms?!"
Los gritos de su padre buscándolo y llamándolo por toda la gran mansión lo alertaron, lo único que pudo hacer fue esconderse hasta que lo encontró.
La plática con sus padres fue dura, su madre al principio lloraba y preguntaba que habían hecho mal, lo peor de todo fueron las palabras y unos cuántos golpes del Señor Heelshire.
"Deshonra."
"Yo no crié a un maldito desviado."
"Seguramente ese tal Billy debe de amarte más que nosotros."
"¿Qué es lo que haces con ese tal Billy, eh?"
" Te hemos dado todo, ¿Y así nos pagas?"
Sacudió su cabeza tratando de quitar tan horroroso recuerdo qué en ocasiones le provocaba culpa y llanto antes de dormir.
Había comenzado la época decembrina. Billy se pasó una mano por los cabellos, revolviéndolos aún más qué el aire de la época.
-¿De veras?. - salió la señora Lenz con su bebé en brazos.- ¿Qué tal si recapacitas y no regresas hasta que lo hayas hecho, maricón?
- Sinceramente no me interesa hacerlo.- tomó la pequeña manita de la infante y la movió un poco mientras le sonreía.- Hasta luego, Agnés.- con su mano igual de pálida que su rostro quitó unos cuantos mechones de la frente de la pequeña y dió un rápido beso.
¿Cuál había sido el problema? Bueno, había sido descubierto utilizando la ropa interior de su madre mientras se arreglaba con su maquillaje.
Una escena cómica ante la vista del novio de su madre quién no lo obligaba a corregir sus conductas, sólo le daba igual, a ser sincero agradecía que su padrastro fuera otro tipo de gente.
Lo obligó a quitarse todo su arduo trabajo, según él, mientras lo llamaba por seis mil millones de insultos denigrantes hacia su físico haciendo que su autoestima bajara.
Había aprendió a no llorar, sinceramente ya se acostumbró, lo mostraba con orgullo y recibía todo tipo de apodos.
Ahora que lo pensaba con más detalle, con el tiempo ya hacía uso de ciertas conductas de su madre y ciertos rasgos de su vocabulario más bizarros y vulgares que en ocasiones solía soltar.
- ¿Sibis, Billi? ¡Ti vis giipisimi cimi ini miriqiiti!.- dijo a su reflejo mientras colocaba con rabia su remera.- ¡Por supuesto!
Tenía la esperanza de que ella no lo hubiese escuchado pero no fue así.
Río mientras recordaba los gritos de su madre por tratar de controlar a su hijo.
Hoy iba a ser una larga noche, necesitaba dinero, él...sólo hacía "favores de fiesta" o cómo el solía llamarle a los polvos rápidos que tenía con adultos jóvenes en tugurios, nada más allá del sexo oral.
El pobre Brahms ni si quiera se lo imaginaba.
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- Si...es hora de darle amor a Billy, el pobre sufrió mucho por culpa de su señora madre que me da pena, aquí si bien no sé aceptan, Billy ama*
Bais.
-Sam 🤍🌈
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Less Is More
FanfictionHeelshire está enamorado del chico castaño de su clase. ¿El verdadero reto? Brahms es un chico volátil y tímido que intentará enamorar al extrovertido Billy, cuándo lo logra se lleva una gran sorpresa. Fecha de inicio: 8- Diciembre- 2020 - EN EDICIÓ...