Improbable (Kharthur)

Recuerdos de la Tierra

El grito de Arthur se escuchó a lo lejos. Khan alzó la vista al aire por un momento y luego volvió a lo suyo. Estaba preparando café e intentando alcanzar una taza de la alacena en la cocina de la nave, nunca se sintió tan humillado, aun si nadie lo estaba viendo. Dio un pequeño salto, trastabilló y hubiera caído sentado de no ser porque algo lo atrapó en sus brazos. Miró hacia arriba y encontró su rostro, osea a Arthur, que lo sostenía por debajo de los brazos.

-¿Estas bien?

-Si

Se alejó del terrícola y miró la taza con recelo. Vio a Arthur, llevaba una camiseta negra pegada al cuerpo y pantalones negros holgados. Su cabello estaba apuntando en todas direcciones, era un desastre comparado con la apariencia usual de ese cuerpo.

-¿Cómo estuvo el baño?

-Bien,gracias

-¿Tuviste algún inconveniente?

-¿Por qué preguntas?

-Te escuché gritar

-Oh, e-eso. Me resbalé en la ducha, es todo

-¿Te has hecho daño?

-Ah,no. Gracias por preocu..-

-Bien, no quiero que dañes mi cuerpo

-...Claro. ¿Aún necesitas ayuda? Te vi caerte al intentar alcanzar eso

-Es tu culpa

-Lamento ser pequeño- dijo apenado

Khan, a pesar de aborrecer la expresión que su propio rostro hacía, pensó que Arthur se veía adorable al disculparse.

-Sólo damela

Arthur le alcanzó la taza y tomó una para él mismo. Agradeció que la USS Veangance no tuviera cocina automatica, el sabor neutro del té en el Corazón de Oro era asqueroso. Se preparó contento su propio té y sopló el vapor de la taza antes de beberlo, esa acción era de sus favoritas al beber. Khan sirvió su café y se retiró de la cocina, Arthur lo siguió sin saber que mas hacer. El super humano fue hasta el puente de la nave y tomó asiento en una silla en medio del lugar, Arthur se sentó en una un poco mas atras. Frente a ellos estaba el vasto paisaje de arena y cielo gris que se encontraba fuera de la nave.

-¿No puedes cambiar la pantalla?- preguntó Arthur

-¿Con qué propósito?

-No ver eso tan deprimente

Khan lo pensó. Se movió hacia uno de los dos asientos de navegación frente a la enorme pantalla y manipuló el tablero. Arthur se apresuró a sentarse en la silla a su lado. En segundos el paisaje cambió a transmisión en vivo de lo que parecía un canal de noticias espacial.

-¿Entiendes lo que dicen?- preguntó Khan al ver a Arthur interesado por lo que mostraban

-Ford me puso un pez Babel en el oído

Khan frunció el ceño, sacó el arma de la bata y le apuntó

-¡¿Qué haces?!

-Tienes un parasito para controlar mentes implantado en tu cerebro. Pueden rastrearte hasta aquí, debo eliminarte

-¡No! ¡No! Es solo un traductor

-¿Cómo era el pez?

-¡Amarillo con forma de sanguijuela!

Khan dudó un momento. La expresión asustada de Arthur se veía demasiado genuina. Bajó el arma y golpeó la oreja del otro

-¡Auch!

-¿Cuál es tu nombre?

-Arthur Dent

-¿Cuál es el mío?

-¿Khan Numi.. San?

-Estas bien

Khan sabía que la torpeza e idiotez eran características humanas, así confirmó que Arthur no estaba siendo controlado por una mente superior. Tocó un botón y la pantalla cambió a un video de mala calidad.

-¡Conozco esa película!

-Es una de las pocas grabaciónes de la Tierra almacenadas en el sistema. Mucha de su historia desapareció cuando fue destruida y poco se salvó

-Cielos, recuerdo que la pasaban todos los domingos a la media noche. Es un clásico

A pesar de su entusiasmo, Arthur sonaba decaído. Añoraba su vida en la Tierra, nació y vivió ahí después de todo. Khan notó el brillo con el que miraba la pantalla, su expresión era nostálgica. Estiró la mano hasta él, la acercó a su rostro y pasó el pulgar por su pómulo quitando una unica lagrima. Arthur lo miró

-¿Qué tienes?- preguntó Khan

-Nada, ¿por..por qué preguntas?

-Yo nunca he sufrido hasta el punto de debilitar mi cuerpo. Es extraño ver mi rostro de esa manera

-Lo..lo siento

-Es..algo desconocido para mí

-¿Llorar?

-No, no es un sentimiento amargo

Su mano seguía en la mejilla de Arthur. Aunque fuera su propio rostro el que estaba frente a él, Khan solo veía a Arthur siendo tan vulnerable y removiendo algo en su interior. Lo miraba tan fijamente que logró ver su reflejo en los ojos ajenos y fue como ver al verdadero Arthur. Eso solo lo incitó a inclinarse mas hacia él, sin apartar su mano o la mirada

-Sandwiches- dijo Arthur

-¿Qué?

-Recuerdo comer sandwiches durante las noches de repetición, mientras veía películas viejas

-¿Estabas.. pensando en sandwiches?

-Iré a preparar algunos

Se levantó del asiento y salió del puente. Khan se tiró en el respaldo del asiento y miró la pantalla; una escena absurda de un hombre cargando una metralleta y disparando a lo loco. La repitió una y otra vez mientras esperaba al terrícola.
Arthur corrió hacia la cocina, golpeó sus mejillas y abrió grandes los ojos

-¿Qué fue eso? ¿Solo yo lo sentí? Que atmósfera tan extraña

Sacudió la cabeza y se enfocó en preparar los aperitivos. Se tardó mas de lo que esperaba, por eso corrió de regreso al puente, rogando que Khan no estuviera molesto. Al llegar tragó saliva y se acercó con precaución, pero la escena en la pantalla captó su atención. Era un clasico del cine, como él mismo dijo

-Yo te creo, pero mi metralleta no

Khan volteó al escucharlo y dejó continuar a la pelicula. Arthur tomó asiento muy concentrado y le pasó un sándwich sin quitar los ojos de la pelicula. No se dio cuenta de la insistente mirada del otro. Lo miró de reojo cuando no tomó la comida, frunció el ceño y acabó por empujar el sandwich a la boca de Khan.

-Estan buenos y no tienen nada malo

Khan arrancó un pedazo con los dientes y se dejó seguir alimentando mientras aprendía historia del cine Terricola.