Capítulo 16 - Draco Malfoy (recuerdos)

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Sostengo los brazos de Luna con tanta fuerza que podría romperlos. Ella se sacude y grita a todo pulmón, aturdiendo mis oídos y rompiendo mi corazón.

Suplica entre gritos y se retuerce de nuestro agarre. Mientras, la tía Belatrix hunde una pequeña cuchilla en la carne de su pierna. Escarba en el musculo hasta rayar el hueso. Y ríe, genuinamente feliz por lo que hace.

No lloro, pero no es suficiente para ocultar mi angustia. Están destrozando a Luna. Están desprendiendo la piel de sus músculos, los músculos de sus huesos... Y el alma de mi cuerpo.

Belatrix lo sabe. No es casualidad que me haya escogido a mí para ayudarla. Soy un goce añadido.

Nunca supe si lo hizo para edurecerme o para castigarme. Pero no me hubiese parecido extraño que fuese un poco de ambos. No habría sido una novedad en mi crianza.

Lo que fue de nosotros  (Druna)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora