un viaje con turbulencias.

367 26 2
                                    

Como todo lo que rodea a Colin, su jet privado es escandalosamente pedante.

Todo es de lujo, desde los asientos de cuero blanco hasta el mini bar repleto de bebidas alcohólicas.

Tengo la sensación de estar en una tienda de artículos de porcelana, parece que al más mínimo roce voy a romper algo y no creo poder pagar nada de lo que hay aquí.

Colin está hablando con el piloto amenamente mientras yo no sé si sentarme, quedarme parada, o desmayarme. Sigue siendo la primera vez que vuelo en avión. Oh dios mío, voy a morir.

─mmm, sé que esto es nuevo para ti, pero la gente normal cuando va en avión no se queda en mitad del pasillo de pie, durante el trayecto, digo yo, vamos.- dice Colin.

Como siempre me quedo en la nube, no me había percatado de que finalmente había elegido la opción de estar de pie.

─ Que sepas que si el avión cae, saltaré con todos los paracaídas y así tu no podrás salvarte.- Pongo cara de desprecio a ver si se lo cree.

─Bueno lo que sea, solo vamos a sentarnos y olvidar tu cara por una vez.

Paso de él pero solo porque recuerdo la situación en la que estoy metida. ESTOY EN UN AVIÓN, A PUNTO DE VOLAR HACIA VENECIA CON UN TIPO RARO Y VANIDOSO.

Si algo bueno hay que sacar de la situación es Venecia. Nunca he viajado y me alegra que este sea mi primera visita tras viajas en avión.

Después de unas cuantas revisiones por parte del piloto y una azafata muy rubia y muy guapa por cierto, el avión despega.

La sensación es muy fuerte y extraña, todo tiembla, escucho los motores tomar potencia, y el avión se mueve. Veo por la ventanilla como la pista se va difuminando, todo va deprisa. No sé qué tiembla más, si el avión o yo. Las luces se apagan y ocurre.

El avión despega del suelo. Se eleva, lo noto, está en el aire, se tambalea unos segundos, pero toma equilibrio y cuando tengo las agallas para mirar por la ventanilla, hemos dejado la pista atrás, cada vez es más y más pequeña. Todo esto me ha mareado. Voy a potar.

─ Colin, no quiero asustarte y por eso voy a formularte primero esta pregunta. ¿Dónde está el baño?

─ SI te digo, ¿qué obtengo a cambio?

─Que no te pote encima.- Digo lo más tranquila que puedo. Noto como la pota sube por mi garganta.

─ Sigue recto y a la izquierda detrás de la cortina. Como dejes manchado algo te juro que abro la compuerta y te tiro al vacio- Dice mientras yo corro por donde ha dicho.

Entro en el pequeño baño, y abro el grifo.

─ASIA, LO HAS CONSEGUIDO, ESTÁS VOLANDO- Me digo mientras me miro al espejo.

Cuando me refresco y estoy más calmada salgo del baño. Cuando regreso Colin ya está ligando con la azafata.

­─ ¿y cuántos años tienes?- Pregunta con aire esperanzador. Su cara dice “ojalá no tenga más de 30”

La chica no hace más que entonar una risilla tonta, con cara de boba.

Me siento en el asiento de la derecha y recuerdo que he traído los auriculares, así que me los pongo y subo todo el volumen del mp3.

Ya ha comenzado la cuenta atrás, se acabará.
No es que no me importe…
es que simplemente sé que lo hará.

¿De qué me serviría pensar que nunca sucedería?
Prefiero preparar…Una fiesta de despedida
por cada uno de aquellos días que fueron tan…

Rápidos, tan fáciles,
tan intrépidos, tan imbéciles…
Que se marcharán.

Cuando la canción termina no recuerdo la siguiente. Me quedo dormida.

Hace tiempo que no soñaba con esto. Desde que vivo con Colin.

 Estoy en el mismo bosque húmedo y oscuro, todo el aire es muy pesado, no me deja caminar, se vuelve más pesado por momentos, se vuelve fango. Me está consumiendo. Intento escapar, pero es más fuerte que yo.

Me rindo, siento que es demasiado para mí. Cuando cierro los ojos, algo me sacude. Tiene mucha fuerza, me sostiene del brazo primero, y luego de la cintura. Me saca del fango, y cuando quiero mirar su cara, solo sus ojos atren mi atención, son de color azul. Me abraza y se vuelve a llevar toda la oscuridad.

─ ¿Asia? ¿Estás bien?

Colin me sostiene la cara, y sus ojos están fijados en mí.

Susurro, algo como ─ ¿te he asustado?

─Estabas moviéndote mucho, parecía que tenias una pesadilla, balbucías algo y he pensado que lo mejor sería despertarte. Estás sudando.

Parece como si le preocupara. Miente tan bien.

Bueno chicas como dije, aquí está el capitulo de la semana, y gracias a todas las que me están comentando y votando continuamente, me dan ganas de seguir escribiendo muchas veces al releer los comentarios. Disfruté mucho haciendo el capitulo, sobre todo en la descripción del despegue, porque en verdad se siente así, y quien se haya subido a un avión sabe. Gracias por leerme y hasta otro capitulo. 💙 💚 💛 💜

¿las ovejas negras se enamoran? (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora