La tienda 24 horas.

273 21 3
                                    

Entramos en la tienda 24 Horas, y pasamos por un pasillo largo, de productos esenciales para la higiene intima…..sí, compresas, tampones, etc.

Llegamos a la parte de comida rápida y nos paramos allí, y observo a Colin.

Él mete la mano en el congelador de pie que hay allí, y veo como se debate entre coger  una bandeja de pollo frito  o una pizza, para meter en el microondas, ambas precocinadas.

-Colin, ¿porqué venimos a una tienda 24 Horas?

-Venga, he dicho que puedes coger lo que quieras de la tienda ¿no?

Colin... ¿Está esquivando mi pregunta?, no quiero que se enfade y me deje sin comer así que creo que será mejor que no insista más por ahora.

Miro por los alrededores, busco algo que me apetezca, pero no veo más que bolsas de patatas fritas, bebidas energéticas…

Entran unas chicas, seguramente aun vayan al instituto porque llevan uniforme, están riéndose casi a carcajadas, y parecen tener mucha energía, eso es algo de lo que carezco ahora.

Sigo mirando que puedo comer, encuentro algunos ingredientes, para hacer espaguetis a la boloñesa con queso, así que decido preguntarle a Colin si en vez de comprar algo ya precocinado, puedo comprar ingredientes para comer como dios manda, pero cuando lo encuentro, está rodeado por las colegialas de antes.

Las cuales se están riendo sonrojadas, y le preguntan cosas sobre él. No parece molesto más bien parece abrumado. Se lleva la mano a la cabeza mientras ríe, le está contando algo gracioso porque dice una frase final y ellas ríen, como si fuera un concurso para ver quien ríe más.

Me acerco finalmente.

-Vale vosotras podéis ser mis princesas y yo seré el príncipe, oh bueno chicas llegó el dragón tengo que irme.-Dice refiriéndose a mí con su dedo acusador.

Es gilipollas, comprobado.

-Vamos, no quiero que les escupas fuego, son encantadoras.

Me tira del brazo, mientras camina. Miro una última vez, a las encantadoras colegialas, pero estás sí que parecen que van a escupir fuego, hasta me parece que les ha salido garras y ojos de serpiente a algunas.

Cuando cambiamos de pasillo, se detiene y me mira.

-¿y tu comida? ¿Es que te lo tengo que explicar despacio? Mira, tu coges la comida con la mano, la metes en una cesta y ya está, por dios Asia, no es tan difícil.

¿EN SERIO? Hasta ha puesto los ojos en blanco.

-Bueno, ya sé que tengo que hacer, no soy estúpida.

-Bueno eso no está claro aún.

-¡Colin! .-Mejor paso de sus estupideces o me quedo sin comida-Bueno lo que quería decir era que me apetece espaguetis a la boloñesa y aquí tienen todos los espaguetis, me preguntaba si podía cogerlos, al fin y al cabo aquí no hay nada decente precocinado.

-Mm, está bien, pero eso implica cocinar ¿no?

-Claro, ese es el truco. Cocinarlo primero.

-Es que estoy seguro de que cocinas mal, y además estoy más que seguro de que me vas a quemar el apartamento.

-No, claro que no. Por si no te acurdas yo trabajo en una cafetería, tengo que saber cocinar. Y por cierto mi comida es deliciosa.

-Bueno, pero yo no probaré bocado. Me da miedo.

Colin parece haber hecho una mueca, pero no una de aprobación si no una más bien de asco.

Nos acercamos a la caja, y hay un chico que parece que acaba de de terminar la etapa de pubertad, porque tiene la cara llena de granos.

Nos atiende.

Cuando estamos a punto de salir, las chicas de antes nos alcanzan, y se despiden de él, y se van corriendo gritando algo como que cuidado con el dragón.

Estamos en el coche de regreso a casa, hay silencio como de costumbre.

-Oye Colin, ¿que pasa con mi trabajo?

No sé porque he sacado ese tema pero tengo que saber que va a pasar conmigo, con mi vida, no puedo dejar así, todo atrás por un estúpido capricho de Colin conmigo.

-Pues, tu padre fue a hablar con Sam, y le dijo que habías conseguido ahorrar lo suficiente como para ir a una universidad del sur, y que te habías mudado a una residencia estudiantil.

- Pero eso no es verdad…

Osea que voy a la universidad, según mi padre. No puedo creer que supiera cual era mi sueño y no haya hecho nada para ayudarme a cumplirlo. Pero que puedo decir, ¿a quien le puedo decir la verdad? Todos pensarán…”Que bien por Asia, finalmente lo consiguió”

Que equivocados están.

¿las ovejas negras se enamoran? (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora