18. Quiero aterrizar en tu corazón - Mewgulf - Terminada

-6-

La tripulación y los pasajeros con regreso a Bangkok, embarcaron de nuevo.

Gulf lucía ya más tranquilo pues había decidido seguir adelante con su vida y olvidarse del estúpido encuentro sexual y del comandante.

Mew por su parte, tomó los mandos del avión intentando concentrarse pero el recuerdo de los ojos llenos de lágrimas, brillantes y acusadores del moreno perturbaban su mente.

—Oh joder, mierda...

-¿Estás bien comandante?, ¿Ocurre algo?

-No Jimmy, tranquilo, es sólo estoy un poco cansado-mintió.

Mientras, el auxiliar y sus compañeras atendieron a los pasajeros en todo lo que necesitaban, dándoles bebidas, bolsas para el mareo, mantas para el frío y algunas revistas o periódicos.

Cuando ya llevaban varias horas de vuelo, nuevamente, Mew puso el piloto automático y fue al servicio de la cabina.

En el momento en que pasó, escuchó como Gulf y las demás auxiliares hablaban.

...-A ver y cuéntanos, ¿y tú tienes pareja o eres un soltero?, ¿Acaso tienes un amor en cada destino?.

-No, nada de eso... Bueno hay algo, más bien creía que podía haberlo pero por lo visto solo era sexo.

Lyn resopló molesta.

-Vaya, los tíos son unos desgraciados, piensan con la polla y que le den a los sentimientos de los demás.

-Oye pues tu tranquilo—habló Sam—… hombres sobran, seguro que hay alguien por ahí perfecto para ti.

-Claro que si,  no pierdo la esperanza…—dijo Gulf en un suspiro— …mientras espero a que aparezca, podré follar con cuantos me apetezca.

—Eso, todo son ventajas—Añadió su compañera echándose a reir igual que lod demás.

Escuchar eso por parte del auxiliar, al comandante no le gustó nada pues este lo había juzgado por eso mismo y resulta que ahora pensaba hacer igual.

—Menudo hipócrita—susurró molesto.

Finalmente entro en el baño y al pasar de regreso, este fue a la zona de los auxiliares y lanzó una mirada asesina a Gulf, él cual ni se inmutó pues había decidido ignorarlo como él lo había hecho anteriormente.

—Agua, por favor.

—Oh si claro, tenga comandante—habló nerviosa Sam, entregándole un botellín.

Cuando este llegó a la cabina, se notaba más intranquilo que antes pero no estaba dispuesto a que un chico con el que había tenido un encuentro sexual, lo sacase de su meta profesional pues no le importaba nada más.

El resto del viaje, Mew se lo pasó luchando contra los recuerdos vividos con Gulf, no podía sacarlo de su mente, nunca le había sucedido una cosa así pues jamás volvía a acordarse de la gente con la que se acostaba.

Había tenido relaciones con otros compañeros y compañeras pero jamás habían hecho ponerse así, por lo que al parecer, el moreno se estaba convirtiendo en un jodido problema.

El aterrizaje fue perfecto, a pesar de todo y los pasajeros fueron bajando uno a uno, mientras que Gulf y sus compañeras, los despidieron muy sonrientes como era el protocolo.

Cuando todos bajaron, entonces les tocó a la tripulación y este volvió a cruzar la mirada con el comandante,  en cuando este salió de la cabina, seguido de Jimmy pero rápidamente, le apartó los ojos y siguió a sus compañeras meneando sus caderas.