Lágrimas del ayer (Blafu)

Capítulo #33

Narra Fu.

Estábamos frente a la puerta de la casa, mis nervios estaban al máximo. Solo sentí que Black me tomaba la mano, eso hizo que me calme, pero solo un poco.
Toqué el timbre y esperamos a que nos atendieran.

Hearts: —abre la puerta y me ve— ¡hola hermano!. —voltea con Black— ah...hola...pasen.

Se hizo a un lado y nos dejó entrar. La casa era linda, hace años que no venía aquí.
Pero no sentía esa sensación de alegría por visitar a un familiar.

Hearts: oye Black, ¿qué tal si nos vas a conseguir algo para nosotros?, lo que sea que traigas está bien.

Black: amm, claro... —me voltea a ver— vamos, amor.

Iba a ir con él pero Hearts me tomó el brazo y me detuvo.

Hearts: nosotros estaremos hablando, ya sabes, volver a ser hermanos amorosos. —me abraza por atrás—

Fu: mm...ve, Black, no tardes, estaré bien.

Black: no te voy a dejar aquí solo. —me toma la mano—

Fu: voy a estar bien, no te preocupes...

No estaba muy seguro, pero quería demostrarle que puedo ser tan valiente como él. Me miró con tristeza y caminó de espaldas hacia la puerta. Una vez que se fue, me sentí inseguro de nuevo. Mi hermano me cargó y me llevó al sillón, sentándome.

Hearts: bien, hermanito, quiero disculparme contigo, hemos tenido muchas diferencias y nos odiamos demasiado. —se sienta a mi lado— pero eso va a cambiar desde ahora. —se me acerca más—

Fu: ...claro... —me aparté— escucha, esto es incómodo, no quería venir aquí por que pienso que me vas a hacer daño.

Hearts: oww, ¿pero por qué?, jamás te haría daño a ti directamente. —me toma las manos—

Fu: o sea...indirectamente sí lo harías... —comencé a preocuparme—

Hearts: ...—dudaba de su respuesta— claro que no.

Fu: tengo que irme. —me puse de pie—

Hearts: ¡no!. —me jala de regreso— quédate más tiempo, por favor, dame otra oportunidad.

Fu: ¡me das miedo!. —por un momento mi voz se quebró—

Hearts: no te voy a hacer nada, por favor. —me mira con tristeza— anda...un rato.

Fu: m-mm...d-de acuerdo. —me senté de nuevo—

Hearts: yey, gracias hermanito.

La puerta de la casa se abrió, entró Black con unas bolsas en la mano. Cuando lo ví sentí alivio, sonreí y me relajé.

Black: traje mucha comida para ti, amor, sé que te dan antojos y pues con una sola cosa no es suficiente. —deja las bolsas en la mesa—

Fu: gracias, Blacky. —me levanté y le di un beso en los labios—

Hearts: si, si, ahora sigamos.

Narra Black.

Mientras los dos estaban en su plática, yo caminaba por la casa, explorando cada parte. Detrás de una de las puertas escuché que algo pesado caía al suelo. Me dio curiosidad, me acerqué a la puerta y la abrí lentamente para que Hearts no escuchara. La puerta llevaba a unas escaleras, las cuales bajaban hasta un sótano.
Me asomé hacia abajo y ví una silueta pasando de un lado a otro.

Alguien me tomó del cuello de la camisa y me alejó de la puerta bruscamente, tirándome al suelo.

Hearts: no tienes permitido entrar allá abajo.

Black: ocultas algo, ¿tienes a una persona secuestrada allá abajo?. —lo tomé del cuello— si es así, exijo que lo liberes inmediatamente.

Hearts: no puedo hacer eso, no ahora... —saca algo de un cajón— dulces sueños, negrito.

Me inyectó un calmante en el cuello. Era un sedante muy fuerte por que en poco segundos ya me estaba quedando dormido.
Lo último que recuerdo fue que me encerraron en un armario oscuro. Luego de eso, nada...

Continuará......

Espero que les haya gustado.

Nos leemos en la siguiente parte.

Chao 🖤