Miedos

123 11 2
                                    

*Narra Carla*

  Después de aquel extraño encuentro con nuestro delegado, Dani, Ariadna y yo nos fuimos a nuestras respectivas clases. No pude evitar lanzarle alguna que otra fugaz mirada a nuestro delegado, que, al contrario que yo, se sentaba en primera fila. Parecía nervioso, y más aún cuando nuestro tutor anuncio la clásica excursión de principio de curso. Iríamos al campo. ¿Qué significa eso? Significa que los profesores nos soltarán allí para que hagamos lo que nos dé la gana, mientras ellos hacen como si nos cuidarán. Perfecto.

El resto de las clases continuaron con naturalidad, aburridas pero con naturalidad. Sin embargo, no podía evitar mirar a Rubén y a David y notarlos muy inquietos. 

*Narra Rubén*

   ¿Una excursión? ¿En serio? Para mi gusto, estamos perfectamente aquí. En clase. Encerrados. Seguros. ¿Qué tiene de malo? Sinceramente, tengo miedo. No puedo evitarlo. Tengo miedo al rechazo, a la humillación, a no gustarles tal y como soy.

*Narra David*

  Una excursión... lo que me faltaba. Es la ocasión perfecta para que me peguen una paliza. Estoy harto de fingir que todo va bien, que mi vida es perfecta. Porque no es así. Soy una especie de bicho raro, al cual poco consideran su "amigo". Podríamos decir que son tres: Marina, Geraldine y José Antonio. A veces, siento que a Carla, Daniel y Ariadna también les importo, pero me parece una posibilidad tan remota, que ni siquiera la considero. Ellos son... ¿guays? ¿Es esa palabra? No lo creo...

    Durante todo el día, noto la mirada angustiada de Carla sobre mí, y, solo por como me mira, sé que quiere hablar conmigo. Le hago un gesto, indicándole que, al finalizar de las clases, debemos hablar. Estoy total y absolutamente acojonado, y no tengo por donde salir de esta.

El club de los marginadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora