Hace cuatro años que Isabela Madrigal partió de su hogar a un lugar alejado de Casita que la vio crecer, aún en el nuevo Encanto, con su familia sanando sus corazones rotos. A veces alejar se de la familia es necesario, para ser quien debía ser y con quién quería estar. Pero eso es algo que los Madrigal, en algunos casos, nunca comprenden. Advertencia: Contenido chicaxchica