Ella siempre fue el fuego; hipnotizaba a todos cuando salia a la pista, incluso cuando solo practicaba para pulir sus técnicas. 𝑬𝒍 𝒄𝒐𝒉𝒆𝒕𝒆 𝒓𝒖𝒔𝒐, como todo mundo lo hacia, era arte verle patinando. Nunca me acerque a ella por miedo al rechazo, la pasaba siempre sola en las practicas, solo tenia ojos para ella. - ¡Viktoria y Alexandra! - Corrí a la pista al escuchar los gritos de Eteri. Mi entrenadora, mejor dicho, nuestra entrenadora. - A la pista, las dos - Mi corazón se lleno de alegría, seria la primera vez en que patinaría junto a ella. - Representaran a dos figuras populares rusas en la cinematografía de superheroes - Yo solo pude asentir a lo dicho por Eteri. - Yelena Belova y Natasha Romanoff - Alexandra aplaudió, tome una de sus manos y la entrelace con la mía, en muestra de apoyo. - Por fin trabajaremos juntas - Murmure cerca de su oído.