Despiadada, mordaz y vacía. Alfa Santino no tiene nada, pero desea tenerlo todo. Con un trabajo de mierda y apenas unos cuantos centavos en el bolsillo, ella camina todos los días a su universidad con la meta de convertirse en la mejor periodista de su época. "Soy demasiado objetiva, no me conmueven las lágrimas en los ojos de un niño, ni tampoco cualquier absurdo sentimentalismo" Buscando un tema para redactar en su tesis, ella misma se vio en una encrucijada cuando sonrió por primera vez al escuchar a su cantante favorito tocar sus canciones preferidas en vivo, un ídolo olvidado de los 80, viviendo con lo que podía ganar en el día. "Por favor, aléjate. No soy bueno para ti, te haré daño, Alfa... Tu aún eres joven, no lo entiendes, pero con los años lo entenderás y me agradecerás por hacerme a un lado..." Delgado, pálido y con unas pronunciadas ojeras, Alfa encontró en él el gran inicio de una excelente carrera. Porque entre los lujos de la creatividad y la miseria de la vida, halló una pasión desmedida. "Canciones escritas con sangre" Portada hecha por la increíble editora Glow Speech Todos los derechos reservados, obra propia