-¡¿Qué estás intentando hacer Xue Yang?! - Xiao XingCheng se acercó rápidamente a Xue Yang y le quita la espada que el menor cargaba en su mano. - Te pregunté algo- XingCheng habla serio.
Xue Yang solo pudo dejar que el mayor le arrebatara la espada y lo agarrara de los hombros, su ceño estaba fruncido y veía la confusión en el mayor. No sabía como responderle, así que se quedó callado.
-¿Por qué quisiste hacer eso? ¿Por qué intentaste matarte? -Habló de nuevo el mayor. Suspiró -Yo no sé lo que te pasa, Has cambiado tanto los últimos días, ya ni comes, no sales de tu habitación, ya no me hablas y solo me ignoras. ¿Por qué? - El mayor habla afligido. El tiempo que ha pasado con Xue Yang han sido tan únicos y con toda esta situación ya no sabe que hacer. Sus ojos se llenan de lágrimas y comienza a llorar. Xue Yang lo ve sorprendido e intenta acercarse a su Daozhang.
-¿Por qué estás llorando? - Le pregunta nervioso. Consolar nunca ha sido su fuerte y no sabe que hacer para que el mayor deje de llorar.
XingCheng sollozando intenta hablar. -¿No ves lo importante que eres para mí? -Xue Yang se queda estático. - ¿Sabes lo que me cuesta verte así de afligido y no poder estar a tu lado? Y ahora te veo con mi espada en tu mano e intentando llegar a tu cuello. ¿Sabes lo que yo sufriría?
Xue Yang se levanta de su cama y se acerca al mayor y se queda frente a el.
- Yo creí que no te gustaba, que me odiabas y sentí que estaba siendo una carga para ti - El cultivador negó rápidamente.-No lo has sido, no niego que los primeros días si eras una molestia, pero pasaron las horas y los días, me di cuenta que disfrutaba de tu compañía y ahora no puedo ver mi vida sin ti en ella. Xue Yang... He tenido estos sentimientos por ti, no sé cómo nombrarlos, pero cada vez que te veo siento algo y me gusta mirarte, ver como sonríes, verte comer tus dulces, no sé cómo llamar este sentimiento, pero no quiero que se acabe. - Xue Yang sentía sus mejillas arder, ¿Entonces siente lo mismo que yo? Se preguntó.
Xue Yang veía como las lágrimas seguían cayendo por el hermoso rostro del cultivador, y se sintió mal por ser el la causa de sus lágrimas. Tomó las manos del mayor suavemente entre las suyas y lo llevó a la cama, para que se sentara.
Se sentó en posición de loto y comenzó a hablar.-Yo no quería matarme Daozhang... -Fue lo primero que dijo e intentó ordenar las siguientes palabras que diría. -Yo estaba viendo la posibilidad de hacerlo, no lo niego. No puedo dormir Daozhang, las pesadillas me atacan cada noche y estoy tan cansado -XingCheng toma las manos del menor y lo sujeta firmemente, Xue Yang siguió hablando. - Tuvimos otra vida Daozhang o quizás sólo yo la tuve, no lo sé. Tu me ayudaste cuando yo estaba herido, tú estabas ciego. Yo había llegado a la secta de Song Lan, matando a todos y Song Lan se quedó ciego, tú por piedad le diste tus ojos... -XingCheng estaba escuchando atentamente. -Tú ibas con una pequeña niña cuando me salvaste, A-Qing era su nombre -Cuando escuchó el nombre, XingCheng sintió una fuerte opresión en su corazón, que casi lo hacia llorar. -Se hacía pasar por ciega y robaba, tú creías que era ciega y por eso la dejaste contigo.
XingCheng lo interrumpe. -¿Qué pasó con la niña? ¿Y Song Lan? -Xue Yang se queda en silencio y baja la mirada. -Por tu mirada supongo que nada bueno - Xue Yang decide hablar, no más mentiras.
-Yo le corté la lengua a Song Lan y tú lo mataste. A-Qing murió, más bien yo la asesine. -XingCheng se queda sin aliento y Xue Yang solo baja la cabeza, esperaba que XingCheng se fuera y lo deje junto a uno de esos hombres que viene cada mes para ver si sigue en esta casa y no se ha fugado.
- Sigue contándome Xue Yang. -Demandó y Xue Yang solo pudo asentir.
-Yo desde el principio sabia quien eras tú y nos fuimos a una pequeña ciudad... Donde le corte la lengua a cada habitante y tú los mataste creyendo que eran cadáveres feroces, yo te hice creer que eran cadáveres feroces y tú me creíste... Mi intención era hacerte sufrir, ya no eras el cultivador bueno, eras tan malo como yo al haber matado a todas esas personas. - Xue Yang de solo recordar la satisfacción que sintió en ese entonces, lo hace querer vomitar. - Luego vino Song Lan a buscarte, yo había ido a comprar al mercado y el apareció... Le corté la lengua y le eché el polvo, de pronto tú llegaste y lo mataste, sin saber que era tu amigo del alma.
XingCheng sentia un nudo en la garganta, creía cada palabra que el menor le decía y no quería pensar en su espada enterrada en el corazón de su amigo, no quería pensar en un Xue Yang mintiendole y burlándose de él, no quería.
-A-Qing me vio y te fue a decir, tú claramente me enfréntate y yo te dije todo lo que habías hecho, no soportaste el dolor y con tu misma espada te mataste.
Las imágenes volvieron a la mente de Xue Yang y el sentimiento de pérdida no se iba, el dolor que sintió al ver la sangre de su Daozhang escurrir por su cuello, hasta llegar al suelo. La sangre carmesí manchando las blancas vestiduras y las vendas de sus ojos ensangrentadas. El último dulce que guardo dado por el mayor y su último pensamiento antes de morir dirigido al cultivador... Siguió contando, aún si el dolor se le hizo insoportable.
-Me enojé tanto Daozhang y perseguí a la pequeña ciega, la encontré y le saqué los ojos y la lengua. La dejé viva porque pensé que te podía devolver a la vida y cuando vi que tu alma estaba en miles de pedazos sin poder restaurarse, la busqué de nuevo y la maté. - Los gritos desgarradores de la niña aún resonaban en sus oídos, esos gritos lo atormentaban todas las noches y sabía que se lo tenía más que merecido, hizo tanto daño. -Cuando el patriarca Yiling volvió, creí que podía ayudarme a restaurar tu Alma, pero no salió como esperaba y terminé muerto. Supongo que eso es todo Daozhang.
XingCheng intentaba asimilar todo lo que el menor le contaba. Tragó grueso antes de preguntar. -¿Cómo es que volviste a la vida Xue Yang? - Esa interrogante lo estaba matando, había tanto que quería preguntar, pero al ver la expresión afligida del menor, se contuvo.
-Una Diosa... -Susurró Xue Yang, que de no ser por el agudo oído del cultivador, no lo hubiese escuchado. -Ella es la Diosa de la misericordia, se apiadó de mí y quiso que volviera a tener una nueva vida, una nueva oportunidad de estar a tu lado Daozhang. - Los ojos del mayor se abrieron de sorpresa. -Quería estar a tú lado Daozhang y pedirte perdón. Mis sentimientos por ti siempre habían estado ahí, solo que me di cuenta tarde y de verdad lamento todo lo que tuviste que sufrir por mi culpa. -Terminó de hablar.
XingCheng agarró el rostro del más joven y lo levantó, chocando miradas. Sonrió dulcemente para luego hablar. -Si tanto querías estar junto a mí, ¿Por qué siquiera pensaste en quitarte la vida? Estuvo mal lo que hiciste, pero eso tú ya lo tienes más que claro. La Diosa de la misericordia te dio una nueva oportunidad, aprovéchala A-Yang. Puedes ayudar a los débiles... puedes quedarte conmigo. Quédate junto a mi A-Yang. -Susurró.
XingCheng sabía que lo que quería hacer estaba mal, pero los labios del menor se le hicieron tan apetecibles, sus labios rojos e hinchados, probablemente se los estuvo mordiendo. Quería probar el sabor de su boca, deseaba besarlo hasta que el aire se les acabara, quería hacerlo. Y lo hizo.
Xue Yang cerro automáticamente sus ojos y sintió la textura del mayor, sus manos aterrizaron en los hombros del cultivador, mientras el otro agarraba su rostro suavemente. Era mejor de lo que se había imaginado. XingCheng acercó el cuerpo del menor a su cuerpo, quería fundirse contra el, quería hacerse uno con el. Sacó su lengua y tocó suavemente el labio inferior de Xue Yang, este abrió su boca para que sus lenguas se juntaran, no era un beso desesperado, era tan dulce que transmitía cada sentimiento.
Xue Yang se separó suavemente del mayor y abrió lentamente los ojos, al mismo tiempo que los abría XingCheng, se sonrieron cálidamente y se fundieron en un abrazo, el menor escondió su cabeza en el pecho del mayor y siguió sonriendo, estaba tan feliz.
XingCheng los acercó a la cama y se botaron en ella, dejando a Xue Yang arriba de su pecho, lo abrazó por la espalda y le dio un beso en su frente.
-Gracias Daozhang, no sabes lo feliz que me haces - Cerró los ojos y suspiró, disfrutando de los latidos del mayor.
-También me haces feliz A-Yang... Muy feliz - Cerró sus ojos y se dejó llevar por el sueño, abrazando firmemente a su menor.
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.Bueno, supongo que es el fin, aún que es muy probable que haga un extra donde aparezca A-Qing.
No sabía cómo iba a terminar esto y no sé si les guste, pero si es así los invito a votar y a comentar.
Ya estoy pensando en otra historia XueXiao🥺 pueden esperarla.
¡Nos vemos pronto!😊
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Una Nueva Oportunidad (XueXiao/XiaoXue)
FanfictionXue Yang tendrá otra oportunidad para enmendar sus errores, solo que con unos cuantos cambios. . . . . Los personajes no me pertenecen.