Una Nueva Oportunidad (XueXiao/XiaoXue)

Extra 2

—¡Oh Dios! ¡Eres hermoso! — Grita Nie Huaisang. Se acerca a donde estaba Xue Yang y le da un pequeño abrazo.

Xue Yang se sonroja y lo empuja lejos. —¿De verdad estoy bien? —Se mira así mismo viendo sus ropajes rojos, estaba nervioso.

Nie Huaisang abre su abanico y se esconde detrás de él —Tan lindo que quiero robarte — Suelta una pequeña risita cuando ve que el rostro de su amigo está por explotar.

—No digas estupideces Huaisang —Lo regaña mientras le da la espalda, para que Huaisang le cepille el cabello y le ponga los adornos. Este lo hace.

—¿Estás feliz A-Yang?— pregunta un muy interesado Huaisang.

Xue Yang no puede evitar sonreír con alegría, su rostro brilla de solo pensar en ya ser oficialmente el esposo de su Daozhang. —Estoy tan feliz Huaisang, como no tienes idea.

—Estoy feliz por ti amigo mío —Huaisang dice con sinceridad. Terminando de hacer los últimos ajustes al peinado de su amigo.

Xue Yang se da vuelta y lo observa. Lo abraza fuertemente, antes de separarse le agradece.

—No hay nada que agradecer A-Yang, eres mi amigo, una persona única que ha pasado por mucho. — Le da una palmadita a la cabeza del más bajo, antes de agarrar sus manos y decirle: — ¿Estás listo pequeño A-Yang?

Xue Yang suspira profundamente y se muerde un poco el labio, nervioso. —Estoy listo —Dice con seguridad.

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XingCheng se encontraba esperando pacientemente a su futuro esposo, sonríe ante el pensamiento de que pronto estará felizmente casado con su A-Yang.

—Esa cara que pones da asco amigo —Song Lan frunce el ceño profundamente.

XingCheng lo único que puede hacer es sonreír, porque está realmente feliz. —No sabes lo feliz que estoy Song Lan, es el mejor sentimiento que he experimentado.

Song Lan rueda los ojos frustrado, una pequeña sonrisa tirando de sus labios. —¡Aún no puedo creer que te quieras casar con el pequeño delincuente XingCheng! —Se queja.

XingCheng tampoco podía creerlo, ¡no puede creer que el día que tanto había esperado esté llegando!
Sus ojos brillan al ver a la pequeña A-Qing en los brazos del gran cultivador Han Guang-jun y Wei Wuxian viendo tiernamente como su correcto futuro esposo, estaba encantado con la pequeña bebé que sostenía.

Habían pasado muchas cosas en los meses que estuvieron juntos. Xue Yang ya le había contado toda la historia, lo que pasaría con Wei Wuxian, el futuro patriarca de yiling. El como moriría y dejaría un alma rota.
Ellos cambiaron la historia de una manera sorprendente. Wei Wuxian no perdió su núcleo, Jiang Cheng tampoco, no hubo guerras, porque cuando estaban a punto de atacar el muelle de loto, ya estaban todos las sectas listas para el contrataque.

Iban haciendo amigos, Xue Yang hizo muchos amigos y eso lo hizo feliz, porque el antiguo delincuente estaba siendo amado de una manera que en su antigua vida nunca lo fue. Escuchó la risa estruendosa de Wei Wuxian y el como las orejas se Han Guang-jun se coloreaban de un fuerte color carmín. Dejó de verlos para volver su atención a su amigo, quien se encontraba a su lado.

—Y yo no puedo creer que estés interesado en el líder de la secta Nie —XingCheng sube y baja sus cejas divertido.

Song Lan se atraganta y comienza a toser ruidosamente, con las mejillas rojas. XingCheng le palmea la espalda. Cuando Song Lan se recupera de su ataque de tos, lo queda mirando y le da una palmada en la cabeza.