𝙸𝙼 𝙽𝙾𝚃 𝙿𝙰𝚃𝙾 ;; 𝗆𝗂𝗇𝗌𝗎𝗇𝗀 .

𝟐.-𝑶𝒋𝒐 𝒆'𝒈𝒂𝒓𝒛𝒂, 𝒒𝒖𝒆 𝒈𝒂𝒍𝒍𝒊𝒏𝒂 𝒏𝒐 𝒗𝒆 𝒅𝒆 𝒏𝒐𝒄𝒉𝒆.

Tras aquella habladera e' paja, seguida por la respectiva entonación del himno, aquella gente cojió pa'su respectivo salón, Jisung se encargó de seguir a Hyunjin, quien lo llevó hasta el área diversificado y le señaló una puerta a la distancia.

—Allá es donde vamos a ver clases—indicó señalando una puerta de color marrón oscuro—aunque también están varios talleres de práctica, pero eso irá dependiendo del horario y tal, tú sabes.

El castaño asintió mientras desviaba su mirada hasta el par de chamos que acababa de conocer antes de hacer la formación, estaban parados con una cara e' ladilla poética junto a unos ocho estudiantes más con cara e' muertos. La puerta de su salón ponía un tablero en la parte superior que decía: 5to año de Contabilidad.

En cuestión, Jisung se ahorró la duda de preguntarles su especialidad, en cuestión, estos debían ser medio patos pa' irse por tal mención.

No mentira, la mención no define tu orientación, porque a Jisung lo ves en electricidad y es rolo e'pato.

El pecosito le hizo señas a lo lejos a Jisung y este le pellizco un brazo a Hyunjin que andaba como el propio muerto de hambre revisando los precios de la comida de la cantina del frente.

—¡Ay coño! —cuando no, Hyunjin con su mardita bulla— ¿te pica ese culo?

—No gafo— contestó el cachetón—tus panas nos están haciendo señas.

Hyunjin puso una cara de ladilla pura y les hizo señas para que se llegaran ellos hasta donde estaban los amienemigos del alma. Hasta aquí me llega el olor de tu flojera Hyunjin.

Total que después de un rato e' jugadera e' kikiriwiki por ambas partes, el pecoso y care' dandy accedieron llegar hasta el otro par de chino-venezolanos homopatos.

—Me hubiese quedao'durmiendo—suspiró Kim colocando ambas manos a los costados de su cintura como jarras—los muchachos están diciendo que la profesora de primera hora no viene, que güevo pelao'

Hyunjin lo miró mal por tremenda poesía refinada que se lanzó.

—¿Y ustedes no tienen clases ahorita? —indagó el pecoso.

—Pues desde aquí se ve la puerta de nuestro salón y no hay nadie en esa jodía—repuso el rubio asomando la cabeza hacia la puerta.

En ese plan de espera se quedaron un rato hasta que fueron llegando a la placita los estudiantes de sexto año, los padrotes, que se habían quedado en la formación por recibir una bienvenida "especial" por ser los de mayor grado académico y tal. El grupito de quinto se les quedaron viendo por un rato pero se sacaron de órbita al oír a Félix Javier pegar un silbido que se oyó hasta la china.

—¡Anda a silbarle así de duro en la pata e'la oreja a tu mae'!—exclamó Hwang a un lado del peligris sobándose el oído.

Total que Félix ni le paró bolas, silbó para llamar la atención de tres individuos de la formación de sexto año, que se desprendieron de ella y se acercaron hasta los de quinto.