𝓟𝓲𝓮𝓬𝓮𝓼 |ꨄ︎| 𝐒𝐨𝐮𝐤𝐨𝐤𝐮 |ꨄ︎|

~ఌ︎ 𝙲𝚘𝚜𝚊𝚜 𝚍𝚎 𝚑𝚘𝚖𝚋𝚛𝚎.

Durante el enfrentamiento contra The Guild, fue necesario la reagrupación del famoso Soukoku. Una rápida pero feroz lucha se llevó a cabo entre Chuuya, que necesitó activar Corrupción, y Lovecraft, que se convirtió en una criatura de dudosa procedencia que aún hoy día estamos investigando si se trataba de un pulpo o un alien.

Dazai había desactivado justo a tiempo la habilidad del pelirrojo, quién obviamente había resultado vencedor, cayendo inconsciente.

Odiaba que pasase eso cada vez que despertaba al Arahabaki, pero no podía permitirse que Chuuya muriese.

Eso no.

—¡Oi, Chibi! ¡Despierta! ¡Ya tengo tus cosas! —exclamaba el castaño doblando el saco del mafioso y colocándolo junto a la cabeza de este, encima puso su sombrero —. Urgh, al menos limpia tu cara, perchero. No te voy a llevar de vuelta así.

¿Cómo iba a tener el rostro sino?

Lleno de magulladuras, golpes, salpicado de sangre y con un hilillo de baba en la comisura del labio.

Sin cuidado, comenzó a limpiarle con sus propios dedos.

Sintió que una palma temblorosa le agarró la muñeca sana, pues la otra seguía en un cabestrillo.

—No... detente... eso duele... —balbuceó Chuuya medio dormido, mirando y sosteniendo a Dazai de la mano —. ¿Por qué siempre eres tan rudo? Dazai... Tonto...

.

.

.

—... Naturalmente, tuve que correr al baño público más cercano. Ash... La maldición de ser hombre... —apoyó su barbilla en el dorso de la mano, aburrido; días después, rememorando lo sucedido en la Agencia Armada.

—Prefiero que guardes esa información para ti —Atsushi se arrepentía de hacer aceptado la propuesta de salir a almorzar—. Realmente no quiero escuchar eso.

Del otro lado de la ciudad, un pelirrojo estornudó.