El niño querido

6.- Bienvenido a la oscuridad

15 de septiembre de 2006

Jane no era un vampiro feliz. No podía creer que Aro hubiera decidido que enviarla a su nueva "misión" era una buena idea. Honestamente ... una misión, que por lo que parece no iba a implicar mucho asesinato, corte, mutilación o asesinato ... qué terriblemente aburrido.

No, tenía que estar loco si pensaba que enviarla en una misión "diplomática" era una buena idea… aunque tenía la sensación de que la razón por la que la habían elegido era porque Harry quería ir.

No la malinterpretes, de todos los miembros de su 'familia' Volturi, Harry era una de las dos personas que realmente le importaban más allá de su deseo de salir adelante ... el otro era su gemelo ... así que eso decía mucho. Pero por mucho que amaba al pequeño tonto, eso no significaba que estuviera feliz por haber sido enviada al centro de Washington.

¿Por qué los Cullen no pudieron al menos haber tenido la decencia de establecerse en Nueva York o en algún otro lugar que no fuera una ciudad al revés? Bien ... lluvia ... sol, etc. A veces ser un vampiro puede ser muy restrictivo.

Una mano agradablemente cálida en su hombro la sacó de sus pensamientos malhumorados. Esa era otra cosa que era ligeramente diferente en Harry ... a diferencia de un vampiro, todavía generaba su propio calor corporal, pero a diferencia de un simple humano, era un calor agradable, no un ardor incómodo.

"Jane, estamos aterrizando ... ¿necesitamos alquilar un coche cuando lo hagamos?" Harry le preguntó mirando por la ventana del avión con algo parecido al asombro. Supuso que realmente no podía culparlo, no era como si hubiera tenido la oportunidad de ir a ningún lado fuera de Volterra… mucho menos volar. Por supuesto que eso no explicaba la fascinación de su idiota hermano; definitivamente había hecho esto antes… por otra parte, siempre había sido el más infantil de todos.

A veces se preguntaba si convertirlos a una edad tan temprana los había encerrado efectivamente en las personalidades que tenían a esa edad. Ella siempre había sido la más seria y responsable (desde que su madre mortal había fallecido, había dependido de ella cuidar de su hermano y su padre ... no es que pudiera hacer mucho por su padre ya que él era más interesado en la botella que en sus propios hijos ... probablemente porque pensaba que eran brujas y responsables de la muerte de su esposa). Si bien su hermano siempre había sido el juguetón y despreocupado… en los siglos desde su transición, eso no había cambiado.

"Sí, alquilaremos un coche para ir a Forks" dijo el nombre de la ciudad como si fuera algo particularmente desagradable, "Severus y Demetri nos encontrarán allí ... deberían habernos encontrado un lugar de residencia antes de ahora"

Severus y Demetri habían sido los otros dos vampiros, (además de los gemelos) que habían sido elegidos para acompañar a Harry. Sabía que el híbrido (porque eso es lo que era Harry… un cruce entre un mago, un humano y un vampiro) pensaba que esto era un asesinato… pero no le habían dicho la verdadera razón por la que tantos de ellos iban con él.

Aro les había informado a Jane y Alec antes de irse, que parte de la razón por la que incluso estaban permitiendo que Harry dejara a Volturi era para retrasar a los magos para que no lo encontraran ... eso decía que tampoco querían dejarlo completamente desprotegido en Forks, de ahí los cuatro vampiros.

El avión comenzó su estremecedor y accidentado descenso hacia el aeropuerto internacional de Seattle-Tacoma y Jane guardó su molestia durante todo el viaje ... bueno, al menos por el momento. Tendría que lidiar con eso ... y al menos existía la posibilidad de que pudiera matar a Bella-chit o, si tenía mucha suerte, todo el aquelarre Cullen ... ahora eso sería agradable.

Con estos pensamientos para aplacarla, sonrió alegremente (o tan alegremente como jamás logró sonreír) a su hermano ya Harry.

Quizás el viaje no fuera tan malo después de todo.