El niño querido

9.- Sospechas hirviendo

Verde y marrón zumbaban juntos; los árboles apenas se distinguían del suelo cubierto de musgo en el que crecían a esta velocidad. Su sentido olfativo en esta forma era mucho más agudo de lo que normalmente le permitía captar y categorizar fácilmente la letanía de diferentes aromas. Corteza, moho, hongos, rocío… .vampiro. Fue el último que la hizo ralentizar sus pasos y dar vueltas hacia atrás.

Cogí algo que envió sus pensamientos al compañero de manada que estaba patrullando con ella.

El profundo tenor (¿y no fue una sorpresa? Nunca había pensado que los pensamientos pudieran tener un tono y presencia antes de que ella cambiara) del pensamiento de Jake rebotó en ella, " ¿Qué es? ¿Una sanguijuela?"

" Sí ... también está en nuestro lado de la frontera" gruñó molesta. ¿Qué pensaban esos chupadores de sangre que estaban intentando sacar? Habían hecho el tratado por una razón. ¿No era suficiente que los bastardos se hubieran mudado aquí y efectivamente arruinaran su vida y cualquier posibilidad de felicidad?

Sintió su picazón de lobo queriendo desatar su impulso primordial de encontrar uno de los mordedores de olor dulce y destrozarlos. Por supuesto que sabía que no sucedería… era demasiado obediente para romper cualquiera de las reglas del querido Sam . Pensó en el apellido con no poca amargura.

¡Vamos Leah! ¿No podemos pasar por una maldita patrulla sin que te vuelvas sensiblera y psicópata conmigo?

Leah le envió una colorida serie de improperios, haciéndole saber cuánto apreciaba ese comentario. Demonios, no fue su culpa que el bastardo alfa fuera y se imprimiera en su hermosa prima.

Un día estaban felices y hablaban de cuando todos iban a llegar para su boda ... al siguiente, Sam se estaba besando con su dama de honor sin siquiera molestarse en hacerle saber que habían terminado. Fue solo otra patada en el estómago que fue uno de su propia familia quien la traicionó de esa manera ... sabía que siempre había tenido motivos para desconfiar de su prima. Supongo que debería haber escuchado ese instinto.

Vete a la mierda Jacob… Me he visto obligado a escuchar tus lamentables quejidos sobre la estúpida chica Swan durante los últimos meses. Oh, pobre de mí… A Bella ni siquiera le importa… huir para estar con Edward… oh boo hoo…. Leah se echó hacia atrás sabiendo que era un golpe bajo, pero demonios, estaba harta de que la manada la molestara porque Sam no tenía otra opción. Qué tontería. Puede que no haya tenido la opción de amar a Emily, pero seguro que podría habérselo dicho antes de que lo pillara chupando la cara la semana antes de su boda.

Hubo un silencio sobre la conexión de la mente del lobo y Leah suspiró para sí misma sintiéndose un poco culpable, Mira Jake, lo siento, eso fue bajo ... ignórame, solo enojado porque una de las sanguijuelas haría alarde de las reglas en nuestra cara al pasar por encima de la línea

Hubo un largo minuto de silencio antes de que sintiera a Jacob ceder, Sí, te escuché ... espera, ya casi estoy allí ...

Unos minutos más tarde, un gran lobo rojizo se acercó a donde ella estaba paseando y bajó la cabeza olfateando el área durante unos segundos antes de dejar escapar un gruñido. Tienes razón ... definitivamente un chupasangre, aunque no reconozco el olor ... podría ser una de las sanguijuelas que no he conocido ... " Los pensamientos de Jacob se desvanecieron y Leah tuvo destellos de una chica duendecillo y el cabello bronce vampiro.

Sabía que debían ser Alice y Edward por las descripciones que Sam había usado para advertirle sobre ellos cuando se había convertido por primera vez. En verdad, ella nunca había conocido a ninguno de los Cullen en persona… no había conocido a ningún vampiro antes. Había escuchado la historia de cómo Jake y los chicos habían destrozado al vampiro intruso pero, por supuesto, no había sido incluido.