El niño querido

12.- Hablar fuera de turno

Ella lo tenía, lo tenía. Ella pensó que había sido bastante paciente y comprensiva estos últimos días, ¡pero ya era suficiente! Su novio no solo estaba aparentemente más interesado en la llegada del monstruo de ojos verdes y luego en poner un verdadero esfuerzo en reparar su relación ... sino que ahora estaba aún más distante y distraído. ¿Y sobre qué? ¿Alguna pelea estúpida con los lobos?

Al principio Bella había pensado que esto era algo bueno. Quizás estaba recibiendo un recordatorio de que no era el único jugador en la ciudad a quien Bella podía elegir. Debido a esto, ella lo había dejado enfurruñarse por el resto del día de ayer, seguro de que llegaría a la conclusión correcta y aparecería pidiendo perdón… y esta vez realmente lo decía en serio.

Ella era un miembro importante de la familia ... era completamente ridículo e injusto que él pensara que podía ocultarle cosas. Estaba segura de que si Edward se enfrentaba a esos imbéciles arrogantes hambrientos de poder, el resto de la familia lo respaldaría… lo habían hecho cuando decidió por primera vez que quería salir con ella después de todo. Así que realmente todo lo que tenía que hacer era decirle lo que estaba pasando… confiar en ella y su familia seguiría su ejemplo.

Se habían unido y se habían encargado de James… podían hacerlo de nuevo. Tal vez incluso podría convencer a Jacob de que los respaldara ... entonces el estúpido idiota arrogante se arrepentiría de interrumpir su vida y tratarla como si no fuera más que un condimento para la comida principal. Hmmm ... tal vez no sea la mejor analogía para usar cuando se habla de vampiros ...

Pero en algún punto de la línea del redescubrimiento de Edward de lo importante que era Bella para él, las cosas se habían desviado. Porque Edward no se había presentado anoche lleno de disculpas y explicaciones… no, ¡de hecho no se había presentado en absoluto!

Bueno, esto ciertamente no serviría ... antes de que ella se alegrara de dejar las cosas y esperar a que otros se dieran cuenta de sus errores, pero parecía que eso no iba a suceder, así que simplemente tendría que tomar el asunto en sus propias manos. Y lo primero es lo primero que iba a encontrar al instigador de este lío y enfrentarse a lo que había causado todos estos problemas.

¡Hágale saber que ella no era una débil presa fácil con la que simplemente podía despedir y jugar! Ella podría no ser tan única o 'bonita' como el usurpador, pero eso no significaba que simplemente se acostaría y lo tomaría… además estaba bastante segura de que él no podría matarla mientras estuvieran en la escuela.

Si hubiera pensado bien las cosas, podría haber dudado un poco más, pero, de nuevo, nunca había sido tan inteligente. Eso y la tranquilidad de los Cullen la habían arrullado con una falsa sensación de seguridad.

Dejó su clase de Trig sin esperar a que Angela o Jessica se pusieran al día, la conversación que estaba a punto de tener sería mejor tenerla en privado ... no tenía sentido arruinar su imagen de 'niña buena-dulce' que tenía, por no mencionar todos ellos. De todos modos, estaría hablando de la persona por la que estaba enojada.

"Oh, es tan misterioso ..."

"Oh, esos ojos ..."

"Me pregunto si tiene novia ..."

…bla bla bla. Amordazarla.

Sabía que Edward no estaría esperando para acompañarla a su próxima clase y, aunque sabía esto, el hecho de que tenía razón todavía la irritaba. Lo más probable es que su novio gordo estuviera afuera sentado en su auto escuchando esa maldita cinta de 'Claire de Lune' ... juró que si tenía que escucharla una vez más, rompería la cosa ... con un martillo ... un martillo realmente grande. … O quizás atropellarlo con su camioneta….