¡Mírame a mí! [Todobaku Fanfiction]

#13: Silencio

Los días pasaban y a Katsuki le seguía perturbando la extraña actitud de Eijirō. Si bien el pelirrojo sonreía ante las bromas de sus amigos, lo hacía de forma distinta, y cuando nadie lo miraba su cara se tornaba triste. Melancólica. Derrotada. Eijirō había dejado de hablarle al rubio, incluso dejaba de ir a su asiento en las mañanas y ya no tocaba su puerta en las noches. Había algo que estaba molestando a Eijirō y Katsuki no sabía qué.

Lo que molesta a Eijirō molesta a Katsuki, así funciona su amistad.

En la hora del almuerzo Katsuki decidió confrontar a Eijirō, preguntarle por qué lo estaba ignorando.

—¿Yo? ¿Ignorándote? —Eijirō rió —¡No seas ridículo!

—No me trates como un imbécil, carajo. Me doy cuenta de que algo en tí está mal.

—¿En... en mi?

—Tu cara... Tal vez esos idiotas no lo noten, pero te ves estúpidamente triste ¿Qué te pasa? —El tono de Katsuki sonaba pasivo agresivo. La parte agresiva hacía que Kirishima se ponga nervioso.

—No... no puedo decirte.

—¿¡Huh!?

—¡Lo siento!

Eijirō intentó escapar pero Katsuki lo detuvo por el brazo

—¡Ni mierdas! ¡No voy a permitir que se sigan escapando de mi!

Eijirō lo miro derrotado, no había nada que pudiera hacer, debía decir la verdad. El pelirrojo bajó la mirada, dejándo tapar sus rojos orbes con sus colorados mechones.

—Si te lo cuento, me odiarás.

—Ya te odio.

—¡Hablo en serio!

Katsuki hizo silencio y soltó la muñeca de su amigo.

—Sabes que estoy aquí para tí y para todo lo que necesites... sabes que no tengo problema en escucharte hablar sobre Todoroki-kun y lo que sucede con él pero...

El rubio dejó que Eijirō continuara.

—Duele... Me duele ver lo enamorado que estás, me duele saber que esos ojos solo brillan así por él y me duele pensar así porque sé que es egoísta... y me duele porque sé que jamás corresponderás estos sentimientos patéticos.

Los ojos de Katsuki se veían confundidos, su boca estaba levemente abierta dejando ver únicamente sus dientes frontales; ciertas cosas empezaban a cobrar sentido.

—Me... gustas. —Se expresó Eijirō por lo bajo.

Silencio. Katsuki no dijo nada. Se abstenía de decir algo ¿Qué podía decir? Se había comportado como un idiota sin tener en cuenta los sentimientos de su mejor amigo y ahora lo tenía en frente, confesándose al borde del llanto.

—Imbécil.

Katsuki tomo a Eijirō del cuello de la camisa y le dió un beso ¿Por qué? Nunca había sentido con él la conexión que sentía con Shōto. Nunca se había movido su corazón con Eijirō como lo hacía con Shōto. Lo que Katsuki siente por Shōto no se puede comparar con ningun otro sentimiento. Pero si algo era cierto es que Katsuki apreciaba mucho a Eijirō.

Eijirō se soltó del beso de Katsuki.

—¿¡Q-Qué haces!? —Exclamaba el pelirrojo con un leve sonrojo.

—¿No es eso lo que querías?

—Sí pero... ¡No tiene sentido si lo haces por pena!

—¿¡Huh!? ¿¡Sabes con quién estás hablando!?