#11: Dulces Sueños

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Izuku se había despertado con energía. Estaba contento y listo para un día de entrenamiento. Se sentía inspirado. Se puso su uniforme y, luchando contra la corbata, llegó a la sala común. Lo que encontró en la misma, lo dejó anonadado.

—¿¡T-Todoroki-kun!? ¿¡Kacchan!?

Ambos chicos nombrados estaban tranquilamente durmiendo juntos en el sillón. Las tazas de té de la noche anterior seguían sobre la mesa, lo que deja saber que se quedaron dormidos. Juntos. Uno sobre otro. Ochako apareció en la escena y tapó la boca de Izuku.

—¡Shhh! Si los despiertas, Bakugō probablemente explote. —Dijo susurrando y destapó la boca de su novio.

—Pero llegarán tarde a clase... —«Aunque un Kacchan enojado no es lo que realmente quiero ver en la mañana...»

Eijirō también llegó a la escena pero desearía no haberlo hecho. Su mirada al ver a los dos chicos duermiendo juntos se quebró. Sin embargo, fue rápido para fingir una risa.

—¿Qué está sucediendo aquí?

—Creemos que se quedaron dormidos...  —Susurraba Izuku.

—Qué raro... Estoy seguro de que ví a Bakugō entrar en su habitación anoche y no salir ¿A qué hora vinieron aquí?

Denki entró a escena.

—Yo había escuchado el ascensor funcionar a las 3am... Dos veces.

—¿Planearon un encuentro? —Tōru llegaba por atrás, emocionada por el chisme.

Poco a poco los alumnos de la clase 1-A rodeaban el sillón verde en el que reposaban Shōto y Katsuki. Este último empezó a sentirse incómodo y lentamente despertó. Muchos corrieron para no ser asesinados, otros curiosos se quedaron. Katsuki sintió el peso de una persona sobre sí, y no entendía nada. Sus ojos se abrieron lentamente y encontró al Mitad y Mitad durmiendo plácidamente sobre su pecho. Con la misma mirada pacífica con la que durmió aquella vez en su habitación.

—¿Huh? —Katsuki miró a su alrededor y varios alumnos se aguantaban las risas. —¿¡Qué están mirando malditos idiotas!? ¡Larguense de aquí!

—Hmm... —Shōto despertaba por la agitación. —¿Bakugō? ¿Qué haces aquí?

Todos rieron.

—¡Cállense! —Katsuki sacó explosiones de sus manos y los compañeros se fueron. Shōto intentaba recordar lo sucedido en la noche anterior. Lo último que recuerda es dormirse en el hombro de Katsuki.

—Lo siento... Me quedé dormido sobre tí... —Shōto se levantó, su cabello estaba desordenado. El corazón de Katsuki no dejaba de latir.

—Tsk... Si tengo que dormir contigo para no estar despierto toda la noche, entonces acepto. —Se notó un leve sonrojo en las mejillas de Katsuki.

Shōto recordó la supuesta confesión. —Bakugō debemos hablar sobre-...

—Se hace tarde. —Katsuki se levantó y rápidamente se dirigió a su habitación. No estaba preparado para hablar con Shōto sobre su confesión ebria. Shōto se lo quedó mirando algo preocupado, en algún momento iban a tener que hablarlo.

•    •    •

Durante clase, Katsuki casi no podía concentrarse. Su mente estaba ocupada por el bello rostro de Shōto durmiendo en su pecho. Quería que fuera así todos los días, quería despertar todas las mañanas con el rostro del Mitad y Mitad a su lado. Para colmo Izuku no dejaba de murmurar cosas detrás de él, lo cuál también le distraía de la clase. Katsuki se volteó furiosamente.

¡Mírame a mí! [Todobaku Fanfiction]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora