10✈️

6.4K 312 37
                                    

Cruce mis brazos molesta viendo cómo made estaba revisando mi maleta buscando algo en ella. Cuando notó mi presencia río e intentó justificarse - Estoy ordenando algunas cosas - dijo made.

- No te di permiso para que abrieras mi maleta - me acerqué a ella molesta y tome la ropa que estaba tendida en la cama para guardarla de nuevo.

- Solo quiero que me prestes un vestido, quiero salir de fiesta hoy. Tranquila.

- Tómalo, pero deja de revisar mis cosas sin permiso, sabés que no me gusta.

Ella asintió y yo me senté en la cama y quité mis zapatos. Me dolían los pies un poco así que empecé a hacerme un pequeño masaje un rato. Made tomó el vestido y me miró de arriba a abajo con una ligera expresión de travesura. Yo volteé los ojos porque sabía que iba a comenzar con sus preguntas y también reí.

- ¿Dónde fuiste?

- Salí a comer - respondí.

- ¿Con un chico?

- Sí - mencioné y ella abrió su boca impresionada - Ahora no comiences con tus cosas otra vez… por favor.

Made río y alzó sus hombros sin preocupación. Sólo se dignaba a mirarme con gracia para después hablar - Tranquila linda. Además te lo mereces, ya debías de superar eso y comenzar tu vida.

La pequeña sonrisa que tenía se desvaneció por completo al escucharla hablar de ese tema. Me levanté de la cama con intención de bañarme y quitar toda suciedad de mi cuerpo, pero made me tomó por los hombros haciéndome mirarla. Por impulso me aparte con brusquedad y la miré mal, ella abrió sus ojos impresionada y yo caí en cuánta de lo que había hecho.

- Ahora estoy bien así - mencioné.

- Yo lo sé, pero por Dios ____, ¡Ya tienes 26 años! Sal y divierte todo lo que quieras - bailo un poco moviendo cuerpo - eres una adulta, ¿Hace cuanto no tienes sexo? - preguntó de repente.

Yo la mire confundida por su cambio de tema de un momento a otro y reí con gracia. Cómo era posible que de estar animandome pasará a preguntarme sobre mi vida sexual, que ella no tenía concentración en un solo tema.

- ¡Oye! - solté una risa - Eso no te importa en nada - me fui corriendo al baño.

Madeleine siempre hacía que mi humor no tuviera estabilidad. Sabía cómo enojarme y como hacerme reír en los momentos especiales, supongo que todos estamos años juntas ella aprendió a leerme aún cuando no mencionara palabra alguna. Made era una de las pocas personas que me entendía y me ayudaba. A pesar de que me vio sufrir en varias ocasiones ella me consoló aunque estas situaciones también la afectarán a ella. Made era como mi ángel y aunque quisiera ayudarme era difícil aún poder superar eso. Quería más que nadie poder olvidarlo y seguir mi vida, pero el miedo de volver a ser traicionada y humillada solo me hacía quedarme en mi burbuja de protección.

Escuche a made gritar mi nombre para que me detuviera antes de entrar al baño, pero no me preste atención y me encerré en este. Después de unos minutos salí como nueva y me apure en cambiarme una vez que vi la mirada acusadora de Madeleine. Ella no se iba a quedar con la duda de saber cuándo fue la última vez que tuve sexo.

- Ven - me llamo -  no te me escapes esta vez, quiero que me lo digas.

- No me gusta hablar de eso, ya déjame.

Se acercó a mí cuando ya había terminado de colocarme la ropa interior y un pequeño top, para tomarme de las manos y guardame a la cama, juntas subimos en esta y con mis brazos tape lo que podía de mi cuerpo, no es que tuviera pena porque ella me vea en ropa interior, solo que hacía mucho frío estos días.

EL VUELO [ 18+]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora