Hearts don't break around here » ls

Siete

Dedicaciones: peachouis , Concholenteja , TomlinsonStyles9491 , alphAlex2809  ♡

Louis odia que Harry haya sido tan fácil con sus hermanas. Ahora, Phoebe tiene una selfie con él que aparece cada que necesita llamarla (porque al parecer es su maldito ídolo y Louis ni siquiera lo sabía) y Doris está enviándole mensajes acerca de cómo él no es tan genial como su amigo Harry porque no le permitió pintar sus uñas.

—Yo sé que hay algo extraño sucediendo entre Niall y Zayn, pero simplemente no quieren decírmelo.

Y Harry está a su lado, como siempre, haciendo su vida un poco más imposible con su mera, fresca y vigorosa presencia.

—¿Importa? —inquiere, irritado.

Styles lo mira perplejo.

—Bueno, no. No realmente.

El cirujano plástico apoya sus codos en el mostrador sobre el que Louis tiene apoyadas las carpetas que está chequeando. Su cabello cae como una cascada sobre sus hombros anchos y se ve suave y esponjoso. Tiene su teléfono celular en una de sus manos, yendo a través de alguna página de internet en la que Louis no está interesado en husmear, pero parece que esa es la intención principal de Harry.

—¿Necesitas algo? —le pregunta al fin, cansado de tenerlo revoloteando a su alrededor (o eso es lo que quiere decirse).

—Hay un nuevo restaurante en el que creo que sería buena idea hacer nuestra fiesta de recaudación, y pensé que podríamos ir a probarlo antes.

Louis ha sido testigo a través de los años de cuánto le emocionan esas fiestas a Harry. Para él, en cambio, se tratan de puras formalidades en las que deben actuar de manera amable y dar una buena imagen para el hospital.

—Hmm. ¿Cuándo es la fiesta?

—En quince días.

—Deberíamos ir la próxima semana —Louis se encuentra diciendo, sin creer las palabras de su propia boca.

El rostro de Harry se ilumina, sus pestañas bailan hacia arriba para mirar al neurocirujano.

—Reservaré una mesa —canta. Sus rizos se balancean cuando se voltea para alejarse por el pasillo, ajeno a todo el desorden que dejó a su paso.

Louis sacude la cabeza, intentando empujar los pensamientos fuera. Odiar a Harry se está volviendo más y más difícil, en especial cuando su sonrisa parece destellar en su dirección con bastante frecuencia.

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Es uno de esos días en los que Louis desearía estar en casa descansando, sin embargo, hay personas lesionadas por un accidente de autobús ingresando en la sala de trauma durante gran parte del día, y él tiene que revisar las heridas de muchos de los pacientes. Después de un par de horas en cirugía, con el cuerpo agotado y la mente en cualquier otro lugar, se dirige a urgencias para asegurarse de poder marcharse sin complicaciones.

—El paciente está estable —le dice a la jefa de trauma en el momento en que se encuentra con ella. Luce bastante ajetreada, con el cabello rojo recogido desordenadamente en la parte alta de su cabeza y la ropa un poco arrugada.

—Genial, Dr. Tomlinson. Parece que hemos terminado por aquí, espero —La Dra. Simons hace una mueca, viendo en dirección a las camillas ocupadas. Está mucho más tranquilo que cuando recién llegaron, pero sigue habiendo quejidos de fondo de algunas personas que recibieron fracturas o golpes.