Perfect Team. »Hyunin«

»13«

Moonbin

—Deja de ignorarme con la mirada. Ya tuve suficiente de tu comportamiento infantil. Se supone que tú eres el hermano mayor.—se quejó Jeongin. Estaban separados por una mesa cuadrada muy pequeña. Moonbin ni siquiera lo miraba y eso estaba frustrando a Jeongin demasiado porque tenía que sacarle el máximo de información que podía.—Quiero que me digas por qué el Clan de la Serpiente tiene a tu hijo. Por cierto, gracias por avisarme que soy tío hace cuatro años.—ahora Moonbin si miró hacia él. Jeongin trató de analizar las situación cuando vio a su hermano ver tras su espalda a los oficiales que custodiaban la habitación. Los ojos de su hermano volvieron a él y luego otra vez hacia los guardias. Jeongin comprendió cuando Moonbin gestuló con la boca una palabra que le hizo poner la piel de gallina: “Me vigilan hasta aquí.” Jeongin asintió.—Está bien. No hables, yo me encargaré de eso y luego tú me vas a contestar todas las preguntas que tengo por hacerte. Confía en mí y si quieres saber...—sonrió.—él estará bien, vamos a sacarlo de allí.—habían pasado años desde que Moonbin había tenido el rostro tan emocionado. Hasta parecía que estaba conteniendo las lágrimas. Jeongin extendió las manos hacia él y él otro algo dudosa las tomó.

Jeongin iba a sacarlo de allí. Lo iba a hacer.

Luego de una corta despedida en la que su hermano apenas le dio las gracias y le dijo adiós. Jeongin se acercó a los guardias y los miró de arriba a abajo despectivamente.

—¿Pasa algo, oficial Yang?—preguntó uno.

—Pasan muchas cosas. Por ejemplo, ¿por qué ustedes deben estar presentes dentro de la habitación mientras yo hablo con mi hermano?—cuestionó.

—El criminal Moonbin ha sido calificado como altamente peligroso y no podemos dejarlo a solas con nadie.—contestó el guardia.

—De ser tal el caso, entonces yo mismo podría reducir a mi hermano si intenta algo extraño. No olviden que yo también soy policía y de un alto rango, superior al suyo. No tengo miedo de meterme en pocilgas criminales, menos voy a tener miedo a estar encerrado en una habitación con mi supuesto hermano criminal. Y...absténgase de llamarlo de esa forma. ¿Peligroso él? Él nunca se ha resistido al arresto y tiene un buen comportamiento tras las rejas. Voy a probar que mi hermano es inocente y para eso voy a revisar toda la basura que tengo al frente.—espetó Jeongin pasando de ambos policías.

Ahora era más complicado. Ahora entendía por qué Moonbin siempre estaba tan callado en sus visitas, por qué colaboraba tan poco con su caso aunque lucía desesperado por salir de aquel lugar. Al parecer, el Clan de la Serpiente tenía policías de su lado, lo que incluía los custodios que tenía Moonbin durante los Vis a Vis. Malditos corruptos, pensó Jeongin saliendo de la prisión.

Había tanto que resolver. ¿Qué debería hacer primero? Tenía que conseguir que el Clan de la Serpiente se alejara de Moonbin y conseguir más información para llevarles más causas a la Corte. La justicia era una mierda en todo el mundo. Esperaba que Bin haga un juicio al Estado una vez que se pruebe su inocencia.

También debía sacar a su sobrino de allí lo antes posible. Posiblemente el niño llevaba toda su vida siendo llevado de aquí para allá con criminales, estaba criado con ese tipo de gente cuando debería haberse criado con el tonto de su hermano, su desconocida madre hasta el momento, sus abuelos y él que ya se veía como un tío tan aburrido que le daba pena por el pequeño.

××

—¿Jeongin sabe de esto?—preguntó Chan con su arma. Todo un escuadrón a sus espaldas mientras Hyunjin no despegaba la vista de su objetivo.