Gotas de lluvia /NoMin

𝔸𝕞𝕠𝕣

El chico más joven se encontraba preparándose, llevaba consigo el traje que anteriormente Jeno le había prestado, pero en esta ocasión le pidió a su madre que le ayudara a modificarlo, tanto así que parecía otro nuevo traje. A Jaemin no le importó mucho el cambiarlo, porque sabía que Jeno no se molestaría, y mucho menos porque lo mejoró.

Estaba totalmente nervioso; se encaminaba hacía el palacio de su amante. Aunque al principio había decidido no ir, la excusa de devolver el anillo era lo único que lo motivaba a presentarse al evento.
Caminó algunos montes hacía arriba cuando por fin llegó al tan extravagante lugar. Entró un poco nervioso, pero nadie parecía mostrarle interés, ya que parecía uno de ellos, alguien de clase y poder. Buscó por el gran salón a Jeno, pero no parecía encontrarlo por ningún sitio así que, decidió esperarlo sentándose en alguna de las tantas mesas. Probablemente el chico estaría ocupado, hablando con sus familiares o arreglándose.
Estaba apunto de levantarse e ir a dar una vuelta afuera pero, fue interrumpido por una voz femenil.

—Hola, nunca antes te había visto, ¿tú eres parte de la familia de..?

—H-hola, yo sólo vine a entregar algo al novio.

—¿a Lee Jeno?

—Sí, ¿lo has visto?

—Bueno no, probablemente esté ahí con su pareja o algo así. —Dijo la chica mientras sostenía su copa de vino. —Debo admitir que siento lástima por Jieun, no entiendo como pudo aceptar casarse con él, todo mundo sabe que él sólo es un tipo promiscuo y probablemente tenga una enfermedad o algo así, tan sólo pensarlo me da asco, es que se ha metido con tanta chica.

El chico se quedó en silencio, podía sentir como algunas personas despreciaban a Lee, realmente no entendía porque lo odiaban tanto, porque ante sus ojos era un ángel caído del cielo.
La orquesta comenzó a tocar con la llegada de los futuros esposos, todos los presentes se pusieron de pie, alabando a la pareja.

—Es un honor tenerlos aquí presentes, familia, amigos y compañeros, parece que fue ayer cuando conocí a esta hermosa chica que me alegra decir que será mi compañera de vida, y más que mi futura esposa, es mi gran amiga.—todos los invitados aplaudieron a las palabras dichas por Jeno quién los recibía con una sonrisa en los labios.

La ceremonia comenzó, con la unión de esa pareja, ambos haciéndose promesas sobre que estarían siempre juntos y se serían fieles. Lucían felices, pero sobre todo parecía que se amaban demasiado, y esto lastimaba cada vez más el frágil corazón de Jaemin.
Llegó la parte que estaba esperando, la entrega de los anillos, caminó hacía enfrente para poder entregar el anillo, pero cuando iba a hacerlo, notó que la pareja ya tenía sus anillos puestos, y ni siquiera lucía igual a la sortija que Jeno le había dado a él.
Cuando por fin habían sido declarados esposos Jieun unió sus labios junto a los de su novio formando un beso romántico que enamoró a toda la audiencia, a toda menos a Jaemin, el cual estaba ansioso de salir de ese lugar lo más pronto posible.
Todos volvieron a sus mesas y Lee no desaprovechó para ir a buscar al menor, mientras que Jaemin lo buscaba a él también.

—Hola Na, un placer encontrarte de nuevo. —Saludó la ahora esposa del mayor.

—Igualmente me da gusto verte nuevamente—le dió una reverencia como señal de respeto. —¿Sabes dónde esta Jeno?

—Salió afuera a esperar a alguien.

—Gracias, ah y por cierto muchas felicidades..

Salió corriendo del lugar para encontrarse a su amado sentando sobre una piedra.

—¿A quién espera señor?— preguntó el más joven a propósito.

—a alguien.. —Volteó a verlo para darse cuenta de quien se trataba y sonreír inmensamente. —¡Creí que no vendrías!

—Pues no podía dejar a un esposo sin anillo aunque..— tomó el dedo del mayor mirándolo un tanto ofendido. — parece que es un mentiroso porque ya tiene un anillo.

—Por eso quería que vinieras— se puso de pie y caminó nuevamente hacía dentro. —Ven, sígueme.

Ambos chicos subieron hasta la habitación del mayor y una vez estando ahí se aseguro de cerrar bien la puerta para que nadie entrase.
Caminó hacía su cajón y de este lugar sacó el otro par de la sortija.

—¿Tienes dos?—Preguntó un poco confundido tratando de entender la situación.

—Jaemin, este es mi verdadero anillo de matrimonio, por lo tanto tú —tomó el anillo y lo colocó en el dedo del chico. —eres mi verdadero amor.

—J-jeno— quedó perplejo al escuchar sus palabras— la otra vez dijiste algo de un romance, pero yo no sabía que significaba, y ahora sé que quiere decir, es cuando dos personas se aman, ¿Tú me amas?

El mayor tomó la mejilla del chico para cada vez acercarse más hacía su rostro haciendo que el espacio entre ambos fuera más reducido haciéndole perder el aliento a ambos.

—Jaemin, estoy tan enamorado de ti, que amarte es poco comparado con el sentimiento que siento al besarte. Estoy completamente perdido en tus lindos encantos.