Para Conquistarte

Capítulo 3

Capítulo 3

La ayuda brindada por Rachel fue realmente buena para Brittany. Con nuevas ínfulas, se dedicó a trazar un plan para conquistar a la chica de sus sueños. Esta vez no buscaría a alguien para darle celos. Eso no le funcionó nunca, porque a Santana literalmente no le importaba lo que hiciera la pequeña Pierce. Sólo había sentido preocupación por ella cuando la defendió del idiota de Evans que se negaba a entender que la rubia quería terminar su relación con él , pero eso había sido porque era la prima de su mejor amiga. Brittany estaba segura de que si hubiera tenido otro apellido, la latina ni siquiera se hubiera preocupado.

Sentada en la biblioteca comenzó a hacer un plan de clases. Lo primero que tenía que hacer era desarrollar en Santana el romanticismo. Y eso sería difícil, porque de lo único que Santana hablaba con pasión era de la música. Su gran y valioso tesoro era su guitarra, regalo de su tío fallecido. Suspiró. Leyendo los libros que le había dado Rachel, la encontró Santana suspirando y al borde de las lágrimas.

- Ey, Brittany! – dijo en un tono de voz tan alto que la sobresaltó. La bibliotecaria le hizo una seña con el dedo para que bajara la voz. Santana se sentó pidiendo disculpas, momento que Brittany aprovechó para secarse la cara.

- Santana... – susurró- debes ser algo más discreta! – La morena sonrió – La bibliotecaria nos correrá de aquí.

- Lo siento – la miró a los ojos – ¿Estuviste llorando?

- No... bueno en realidad es que me he emocionado... – la morena sonrió.

- ¿Estabas leyendo alguna novela romántica? – La rubia torció los ojos.

- ¡Claro que no, boba! – dijo seria – Estoy tratando de hacer un plan de clases para ayudarte con tu problema – se acercó un poco más porque la bibliotecaria recorría el pasillo donde se encontraban.

- ¿Ah sí? – dijo la morena acercándose más. Brittany podía ver lo profundo de sus pupilas.- ¿Y dime qué es lo que estás leyendo?

- Poesía– la latina hizo cara de asco – no le hagas esa cara, porque esta será tu tarea, durante los primeros días.

- ¿De qué me estás hablando Brittany? – subió el tono de voz.

- ¡Niña! – dijo la bibliotecaria – Si no bajas la voz, te echo de aquí

- Disculpe usted señora... – la miró - ¿De qué estás hablando? Yo no leí poesía antes, ¡No lo haré ahora!

- ¡Basta! Por eso eres una idiota insensible y poco romántica

- ¿Si? ¿Qué te hace pensar en eso?

- A ver Lopez... dime algo bonito – la morena la miró – ¿Eres capaz de decirme algo halagador?

- ¡Por supuesto! – estaban bien cerca. La rubia le hizo un parpadeo de ojos que confundió a Santana. Nunca ella había hecho eso.

- Estoy esperando Santana... – dijo en una voz algo melosa, y le sonrió.

- Bueno... - carraspeó – tienes una linda.... guitarra y bailas muy bonito Brittany – ella le pegó con el libro.

- ¿Te diste cuenta que eres de lo peor? – la latina la miró.

- ¡Es un bonito halago! – dijo ofendida.

- ¡Pero yo me refería a un halago de mi persona! – Shhh, se oyó a lo lejos – ¿Cómo quieres conquistar a una chica si halagas su guitarra?

- Y bueno tú me dijiste...

- ¿Es que yo no te parezco atractiva? No tengo bonitos ojos, linda sonrisa, un buen trasero