Amor Mentiroso [+18]

Capítulo 36.

Holaaaa!! Siento mi tardanza -.-" prometí que subiría el pasado viernes pero ya ven que no lo hice. Lo siento de verdad, estuve bastante ocupada estudiando y haciendo algunas cosas PERDÓNEMEN!! Pero les traigo un capítulo que nunca olvidarán, es extenso e I-N-T-E-N-S-O e.e Seguramente os sorprenderéis que rumbo va a tomar la historia de #Damelia en estos últimos capítulos. Sí digo últimos porque este y el siguiente serán los últimos de esta parte.... No van a creer que va a pasar... Espero que les guste y como digo siempre no olviden dejar sus comentarios y votos!! Adoro leer lo que piensan así que por favor COMENTEN!! Hasta el próximo capítulo!! Os ama, GCRodri <3

PDT: Le dediqué el capítulo a una gran amiga o mejor dicho MEJOR AMIGA que tuvo que soportarme estos días!!

PDT: YA QUEDA MENOS PARA 50 SOMBRAS!! No están emocionadas!!?? X___X

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Mi corazón estaba sufriendo un paro cardíaco. Empecé a sudar y me quedé paralizada en la silla sin mover ni un miserable dedo. No podía apartar la mirada de esa imagen ¿cómo había llegado ahí? Había temido que esto llegara, tenía que contarle todo a Christy… Tragué saliva y lentamente levanté la mirada hacia mi amiga que esperaba impaciente una respuesta por mi parte.

-¿Leíste el artículo?- preguntó con voz fría y distante. Nunca antes había visto a Chris de este modo. Parecía enfadada. Muy enfadada.

-Chris creo que tenemos que hablar- empecé a decir pero el sonido del celular de Chris me interrumpió. Dejé escapar todo el aire cuando vi a mi amiga descolgar y sonreír de nuevo. Jugueteé con mi taza y le di el último sorbo al café, lo tragué aunque se había enfriado y estaba asqueroso. Esperé a que finalizara su entretenida conversación y cuando lo hizo dejó el celular a un lado y me miró sonriente.

-Siento haber actuado como una perra- se disculpó agarrando mi mano y estrechándola entre las suyas- me dejé llevar por los celos, osea no estoy celosa de ti amiga obviamente que no, tú nunca me harías algo así Amelia sé que es trabajo. Siento haberte puesto en una situación incómoda- me dedicó una sonrisa de disculpa- ¿sobre qué tenemos que hablar?

-Nada importante- las palabras habían salido de mí sin pensarlas. Me había acostumbrado a mentir que me estaba convirtiendo en una experta. Me levanté y recogí las bolsas del suelo, Chris me miraba confusa- ¿piensas quedarte todo el día ahí sentada? Las compras no van a hacerse solas.

-Quiero que mi amiga Amelia sea todos los días así- me señaló orgullosa de que yo estuviera cediendo a comprar pero todo era parte de mi técnica para despistar a Chris. Me sentía como una mala persona.

-No te acostumbres a ello- esbocé una sonrisa forzada y tiré de ella para que se levantara- ¿dónde quieres ir ahora?

 

Chris condujo esta vez hasta Madison Square Park donde mi amiga arrasó con todas las tiendas obligándome a comprar más de lo que mi bolsillo tenía permitido. Después de una intensa mañana de compras Chris y yo decidimos ir a comer porque nuestros estómagos no dejaban de rugir. Comimos en un pequeño restaurante tailandés y volvimos al apartamento.

Conduje hasta el apartamento de Chris y agarró todas las bolsas, incluso el portero tuvo que salir y ayudar a mi amiga porque ella no podía con todo. Reí al ver la cara de espanto del pobre hombre y me encogí de hombros cuando me miró.

-Te llamaré- dije mirando por la ventanilla a mi amiga.

-Quiero saber todo de Stev- movió las cejas pervertidamente y volteé los ojos.

Puse en marcha el motor y empecé de a conducir. Necesitaba volver a casa, darme una ducha relajante y tumbarme en mi magnífica para dormir como nunca antes lo había hecho. Mi plan era perfecto.