CAPÍTULO 8: "Cheer Queen"

106 3 1
                                    

CAPÍTULO 8
CHERR QUEEN 

When I grow up -The Pussycat Dolls

Scarlett

Luego de unos minutos salí de aquella oficina con mi horario en mano. Miré el pequeño papel, me di cuenta que iba tarde a mi primera clase. Perfecto, tarde el primer día, justo lo que me faltaba. Iría a mi casillero después de esa clase, no podía llegar más tarde de lo que ya iba. Aceleré el paso mientras agradecía mentalmente no haber traído tacones. Algunos segundos después me encontraba a fuera del aula indicada; la puerta estaba abierta, varios estudiantes estaban ya en el salón, mas el maestro no. Suspiré aliviada, al menos no había llegado tarde a la primera clase. El maestro llegó posteriormente, haciendo que la clase pareciera más corta; prontamente tocó el timbre, me apresuré a tomar mis cosas para salir de aquel salón. Muchos recogían sus cosas con calma, mientras hablaban con sus amigos, sin embargo mi caso era diferente, todos mis amigos estaban en universidad en este momento, dejándome sola es esta miserable escuela secundaria. 

Suspiré antes de salir de aquel salón para dirigirme a mi siguiente clase: cálculo diferencial, por fin una clase que valía la pena. Después de la tortura de dos periodos de historia no podía esperar para tener una verdadera clase. Tenía unos minutos libres antes de que la clase diera comienzo, así que decidí ir a mi casillero a dejar algunas cosas. Caminé por los largos pasillos de la escuela buscando el número escrito en el pequeño papel. «207B» ¡Joder! Uno de los de abajo. Refunfuñé. Seguí caminando hasta que llegué al casillero asignado. Oh, no, tenía que haber un error. Ese idiota estaba persiguiéndome. Harry estaba recargado en las taquillas, mirando fijamente el suelo. Me quedé parada a unos metros de donde él estaba, mirándolo, esperando que por arte de magia pudiera derretirlo con mis ojos. Volteó a verme con una sonrisa de autosuficiencia. 

–Scarlett.

Su molesta voz penetró mis oídos. Quería lanzarme hacia él y desgarrar su garganta o algo. ¿Quién se creía?

–Harry, ¿qué haces aquí? –pregunté cruzando los brazos.

–Resulta, preciosa –dijo alejándose de donde estaba, caminando hacia mí. Reprimí las ganas de darle un golpe en la cara por usar aquella expresión–, que estoy en mi casillero –dijo deteniéndose a una distancia considerada de mí, señalando el mismo que se suponía era mío.

–Bien, pues debe haber un error, porque ése –dije señalando el mismo que había señalado–, es el mío.

–No, no –dijo tranquilamente, incluso divertido–, no hay ningún error aquí. Debemos compartirlo –dijo mostrándome su hermosa sonrisa, tan pronunciada que logré ver sus hoyuelos.

Está bien, podía molestarme profundamente su actitud e incluso su presencia, mas no podía negar que era uno de los seres humanos más hermosos que había visto en mi vida.

–¡Imposible! –solté molesta–. En una escuela privada no compartes casilleros.

–Lo siento, su real majestad –dijo fingiendo una inclinación, provocando que mi ira creciera–, tanto como a ti como a mí nos inscribieron tarde aquí, la consecuencia es compartir casilleros.

Golpear a Harry para borrar aquella sonrisa de su rostro se volvió una opción bastante tentadora. No podía estar pasando aquello, la vida definitivamente me odiaba.

Escuché una campana sonar, indicando que la siguiente clase estaba por comenzar. Gruñí, no debía llegar tarde a clase simplemente por pelar con Harry. Suspiré descargando mi enojo así en vez de golpeándolo.

–No hemos terminado aquí –dije dándole la espalda para caminar a mi clase.

–Estoy ansioso por verte de nuevo, preciosa –dijo a mis espaldas.

SPACES |«h.s»|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora