SPACES |«h.s»|

CAPÍTULO 19: "New"

CAPÍTULO 19

 NEW

Right Now –One Direction

 

Scarlett

–Bien, esto es una intervención, S –dijo mi mejor amiga sacándome de mi ensimismamiento.

Últimamente había pasado mucho tiempo con Mabel; América y Niall estaban todo el tiempo ocupados en la universidad, la cual no les dejaba suficiente tiempo para mí, así que Mabel y yo nos habíamos vuelto muy cercanas.

–¿Qué? –pregunté volviendo a la realidad– ¿Intervención? –mencioné algo perdida.

–S, ¿crees que no me he dado cuenta de qué Harry y tú no han hablado desde el baile de debutantes? ¡Toda la escuela se ha dado cuenta! Eran inseparables antes de eso, han pasado semanas desde la última vez que los vi mantener una conversación de más de 30 segundos. ¿Hay algo que deba saber? –preguntó levantando una ceja.

Desventaja de pasar tanto tiempo con ella: Me conocía demasiado bien. ¿Qué si algo estaba pasando? Sí. Suspiré pesadamente, sabía que en algún momento tendría que contarle.

–Tal vez pasó algo entre Harry y yo esa noche… –dije mordiendo mi labio inferior. Esto sería más difícil de lo que pensé. Los azules ojos de Mabel se abrieron en sorpresa.

–¿Algo como “el algo”? –dijo resaltando las últimas palabras.

–No –dije divertida, su cara era inigualable–, no ese tipo de algo. Nos besamos, como, intensamente.

–¡Oh, vamos! –dijo rodando los ojos– ¿Estás hablando en serio? No es la primera vez que tú y él se besan, a millones de kilómetros se puede notar la atracción que hay entre ustedes, no me digas que realmente dejaron de hablar por un jodido beso –dijo algo cansada, como si fuera lo más obvio del mundo.

–¡No! –dije algo exasperada–. Como dijiste, nos hemos besado muchas veces antes, pero esta vez fue diferente, no fue el beso, fue lo que pasó después.

Tardé algunos minutos explicando lo que había pasado esa noche, desde el baile de debutantes hasta que llegamos a mi casa. Mi amiga únicamente escuchaba atentamente. Esto era frustrante, pensé que al contarle a alguien como me sentía sería más fácil entenderlo, no obstante, a medida que revivía ese día más confundida me sentía.

–¿Acaso eso significa que te gusta Harry? –preguntó Mabel con una gran sonrisa. Puse mi mano rápidamente sobre su boca, la gente aquí no se podía enterar, si en algún lugar corrían rápido los chismes era en St. Maria Goretti– ¿Eso es un sí? –murmuró debajo de mi mano. Rodé los ojos.

–No lo sé –dije quitando mi mano, resignada.

–¡Claro que sí! –dijo, más feliz de lo que hubiera esperado– Sólo estás en fase de negación.

–Bueno, es bastante difícil aceptarlo cuando él no siente lo mismo.

–Esa es la mentira más grande que he escuchado, tú y Harry son como el uno para el…

Mabel se calló abruptamente, viendo algo detrás de mí. Mágicamente, como si el destino quisiera mostrarle a Mabel que yo estaba en lo correcto, apareció Harry, tomado de la mano de la gran zorra, digo, de Rebecca. Algo dentro de mí se removió. La idea de ir a golpear la operada nariz de Rebecca apareció en mi cabeza. ¡¿Cómo se atrevía esta perra?!

–¿Lo ves? –dije intentando reprimir mi enojo.

–Bueno, ni siquiera es el mejor chico de la escuela, estoy segura de que en cualquier momento te podríamos conseguir a alguien mejor –dijo mi mejor amiga tratando de consolarme.

El único problema es que yo no quería a nadie más. Quería a Harry.

–Comencemos la operación “buscar alguien mejor que Harry” –dijo ahora emocionada.

De acuerdo, debía darle puntos a Mabel por su entusiasmo, sin embargo, para lo que menos tenía ganas en ese momento era para buscar “prospectos”, como los había llamado ella. Me sentía pisoteada, dolida, tenía este extraño sentimiento de opresión en el pecho.

Caminamos a nuestro salón de Literatura, Mabel parloteaba acerca de lo genial que sería encontrar a alguien para mí y blah, blah; no prestaba mucha atención, pensaba en Harry. ¿Por qué estaba saliendo con Rebecca? Nunca pensé que caería tan bajo, Rebecca era la persona más superficial del mundo, podría jurar que Harry era mejor que eso, siempre se había quejado de lo superficial que eran las chicas de esta escuela, ahora estaba saliendo con la más hueca de todas. De la nada, un extraño golpe me sacó de mis pensamientos. Alguien había tropezado conmigo, y ahora, ambos nos encontrábamos en el suelo, al igual que nuestras cosas.

  –Lo siento muchísimo –dijo una voz masculina que nunca había escuchado antes.

Volteé a donde provenía el sonido. Un chico rubio que nunca había visto se encontraba recogiendo las cosas que ambos habíamos tirado. Su cabello era algo largo, no tanto como el de Harry, peinado hacia atrás, sus ojos eran de un azul increíblemente intenso, su rostro estaba decorado por algunas pecas y tenía una perforación en el labio que le daba el toque perfecto. Para el momento en que terminé de analizarlo, él ya se encontraba parado junto a mí, tendiéndome una mano para ayudarme a levantarme. Bueno, tal vez el destino había encontrado a alguien mejor que Harry. 

Para el final del segundo periodo Mabel ya había investigado a fondo a este misterioso chico. Su nombre era Shawn Schneider, él y sus padres habían llegado aquí un par de años atrás, no obstante, era nuevo en St. John Neumann. Me sorprendía no haberlo visto antes, tal vez Mabel tenía razón, tal vez había pasado mucho tiempo atascada con Harry.

Mabel era rápida, para la hora del almuerzo ya había logrado que Shawn se sentara con nosotras. Era guapísimo, nadie podía contradecir eso, mas al verlo no podía evitar compararlo con Harry; además, a miles de kilómetros se podía notar la atracción que había entre él y Mabel, ella lo ignoraba porque era un “prospecto” para mí, aunque a partir de ahora yo lo convertiría en un prospecto para ella; lo merecía más que yo. 

***********

Dejo esto por aquí, espero que les gusté ;) Enjoy. 

xoxo, 

-S.