CAPÍTULO 44

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Quito la tetera del fuego para ponerla a un lado con un suspiro quedó. Raymond ya se había tardado un poco.

Dio otro suspiro, ese viaje había sido tranquilo después de todo, con silencios que no eran incómodos y pláticas triviales sobre cualquier tontería, estaban a sólo unas horas de llegar, pero la noche los había alcanzado, por lo que que decidieron acampar para no conducir a oscuras. Las tiendas ya estaban armadas y ellos ya habían cenado, Chiara le estaba preparando un te a Raymond, que se había ido unos 20 minutos a caminar.

Con otro nuevo suspiro, ella se levantó para irlo a buscar, con un poco de preocupación de que estuviese lastimado o algo malo le hubiese pasado.

Pero el chico no estaba herido. Estaba tomando un baño en el río que pasaba a unos metros de ello.

Chiara se sonrojó completamente, y rápidamente giró su cuerpo cubriéndose la cara con ambas manos para no seguir viendo. Sin querer había cumplido el "encargo" de Alejandra y sus ojos habían comprobados eso que sus caderas habían sentido hacía ya bastantes días. Sacudió la cabeza, aún entre sus manos, mientras iba de nuevo al campamento tratando de olvidar lo que había visto y sacando de su cabeza todas las locuras que pasaban por ella. No debía de pensar en Raymond de esa manera.

Quiso caminar con más rapidez a la tienda. Pero con las manos en su cara aún, no vislumbró la mochila en el suelo, por lo que se tropezó con ella cayendo de frente, sobre los troncos que habían recogido para el fuego.

- Chiara: augh (se quejó aún en el suelo) (se sentía patética)
- Raymond: ¿estás bien?

Sintió como la levantaba del suelo por la cintura para luego girarla, quedando de frente al culpable de toda esa situación. Se sonrojó de sobremanera nuevamente.

- Chiara: eh...
- Raymond: ¿alguien te ataco? (Preguntó)
- Chiara: m-me tropecé c-cuando iba a-a-a.....

Se quedó de piedra al ver que el chico no tenía puesta la camiseta, seguramente se dirigió hacia ella en cuanto la escuchó gritar, lo que significaba que había llegado a ella de la misma manera de la que había salido del Río..... el río en el qué estaba tomando un baño.

La mujer se puso aún más roja de lo que ya estaba, tanto que sintió que salía humo de su cabeza, antes de dejar caer la cabeza hacia atrás perdiendo la conciencia.

- Raymond: ¿eh? (Dijo al ver el cuerpo de la mujer se había relajado por completo echando la cabeza hacia atrás) ¿Chiara?

La movió un poco, pero la mujer no reaccionó. Soltó un suspiro algo frustrado. La había visto dirigir su mirada hacia su pecho desnudó antes de desmayarse, seguramente seguía siendo tan tímida como la recordaba. La cargo con delicadeza antes de meterla en la tienda y acostarla sobre su bolsa para dormir, para luego ir por su ropa al río.

Cuando regreso al campamento, descubrió la taza junto al fuego, seguramente ella lo había preparado para él antes de tropezar. Lo tomó con una pequeña sonrisa, la mujer era algo torpe, pero eso mismo solía hacerla muy linda. Estuvo a punto de escupir el té al descubrirse con esos pensamientos hacia ella. Sacudió la cabeza levemente para después tomar el té con calma. No debía dejar que esos pensamientos poco convencionales entraren a su cabeza.

(•••)

- Jessenia: (Miró a Luis murmurar y maldecía mientras pasaba pila de papeles de un lado a otro, y dio un suspiro algo frustrado) ¿qué pasa? (Le pregunto algo extrañada)
- Luis: (la miró antes de bajar la mirada y dar un largo suspiro) Chiara se unió a raíz (dijo casi tirando los documentos)
- Jessenia: (lo miró con sorpresa) ¿que?
- Luis: (asintió, no admitiendo decirle que Raymond fue con ella, por miedo a que rompiera algo) Rodrigo la dio de alta, como no es militar activa, no tiene que pedirme permiso
- Jessenia: (dio un bufido) estupido Rodrigo, primero lo de Carla y ahora esto
- Luis: (soltó otro suspiro) de verdad me preocupa ese tratado (dijo viéndola ) RD y raíz podrían destruir la ciudad si se lo proponen
- Jessenia: (volvió a soltar otro bufido, todo se estaba saliendo de control) todo estará bien (mintió)

Luis asintió, aún sabiendo que eso apenas era el comienzo de la catástrofe.

(•••)

Despertó algo sobresaltada, y tardó unos segundos para recordar donde estaba. Dio un suspiro mientras se cubría los ojos con unos de sus brazos. Aún era de noche a las afueras de la tienda y su compañero dormía cerca de ella. Si rostro se tornó rojo otra vez ante el recuerdo que tenía de él y mucho con su cuerpo para no volverse a desmayar. De seguro Raymond pensaba que estaba loca.

El moreno seguramente tuvo que cargarla a la tienda y acostarla en la bolsa de dormir, apagar el fuego recoger las cosas que estaba fuera de la tienda. Se dio un golpe en la frente, ella prácticamente no había servido de ayuda en nada en esa misión.

Dio un suspiro y giró sobre su costado, viéndolo dormir.

No se veía tranquilo, tenía el ceño fruncido y los puños cerrados con fuerza, también nota que sudaba levemente y apretaba los dientes. Eso la asusto un poco y con precaución se acercó a él. El moreno giró hacia un lado mientras apretaba aún más los puños y soltaba un suspiro, para Chiara era claro que estaba teniendo una pesadilla.

- Raymond: Melvin (susurró moviendo el cuerpo hacia el otro lado para luego regresar con brusquedad) no tienes que hacer esto, para

Chiara lo observo y sintió que el corazón se apretaba dentro de su pecho, había olvidado cuanto dolor había tenido que pasar el moreno, el cual solo se vio aumentado cuando dejó a jessenia, sin pensarlo, hizo lo mismo que hacía con Max cuando tenía una pesadilla, abrazarlo. El moreno dejó de retorcerse contra ella lentamente hasta quedarse quieto. Chiara suspiro y lo abrazo con más fuerza, queriendo darle aunque fuese un poco de apoyo del que él le había dado.

(•••)

Miró el techo fijamente, aunque su mente viajaba si querer hacia esa persona una y otra vez. Aún después de la actividad antes realizada, y que esa cama fuese muy suave y cómoda, no podía dejar de pensar en ella.

- Lara: ¿en qué piensas?
- Jeyson: (se sobresaltó levemente ante le voz, para luego girar su mirada hacia ella y darle una sonrisa) nada, pensaba en Chiara
- Lara: (resopló dándole la espalda) no creo que sea buena idea que hables de ella en estos momentos,

Jeyson suspiro algo frustrado al ver que su novia, se había molestado ante su comentario, giró sobre su costado y la abrazó por la cintura pegando su cara a su cabello. Ese cabello que le llegaba a gustar tanto cuando se lo dejaba suelto, cosa que solo sucedía en momentos como ese.

Un Amor Después Del Dolor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora