La corona | Taekook |

33

Capítulo 33

Después de una sesión de besos por parte de ambos, bueno...

Taehyung por más que quisiera quedarse pegado a Jungkook, tenía que pensar en algo para arreglar el alboroto que había hecho.

No sólo le había faltado al respeto nuevamente a su padre, sino que le había gritado a Nayeon poniendo en juego el 'matrimonio de amor' y la confianza con el rey, de alguna manera, sabía que la había cagado tal vez un poco al no pensar en las consecuencias de sus actos.

¿Se arrepentía?

Para nada.

Es más, hasta estaba agradecido.

"Bueno, uh, ¿por qué me correspondiste?" preguntó tímido el alfa como si no hubiese hace unos minutos devorado la boca del otro hasta saciarse un poco de sus labios.

Porque en realidad no estaba satisfecho para nada.

Jungkook lo miró sonrojado, sin embargo, no contestó.

"¿Lo hiciste porque querías? E-es decir ¿Te gusto, gusto?" volvió a preguntar Taehyung jugando con sus manos.

El rubor ahora subió por toda la cara del omega, pero esta vez asintió bajito.

"P-pero nunca mostraste señales, yo... yo pensé que era el único que tenía sentimientos" le dijo sorprendido no evitando sonar emocionado.

"No sé porque lo preguntas, Taehyung. Me gustas y ya... te lo dije antes ¿hay alguna razón más?" escondió su cara entre sus manos escuchando una risa del contrario.

"No, no, solo estoy muy feliz" quitó las manos del omega ensanchando su sonrisa "Quiero ver tu cara, precioso" sonrió tímido al utilizar ese apodo no sabiendo si al otro le incomodaría.

Jungkook le dio un golpe en el brazo.

Y así siguieron dejándose pasar un tiempo entre risas y miradas brillantes.

Un rato después, habían decidido sentarse tranquilamente a los pies de la cama esperando que Mina se despertara, no sabían qué había pasado, por lo que no era conveniente hablarle —aunque ya lo hubiesen hecho y la misma no respondió a sus llamados—.

Taehyung aún tenía el pendiente de qué pasaría cuando saliera de esa habitación, pero por el momento, disfrutaría estar con su omega, sí, su omega, qué correcto sonaba eso en la mente de Kim... estaría un rato más en su compañía hasta tener alguna respuesta de la alfa.

No fue hasta las once y media de la noche que Mina abrió sus ojos de un momento a otro, para aquella parejita fue un alivio verla despertar, pues no se habían ido de la habitación. Taehyung informó que no asistiría a la cena ese día, y suponía que los 'invitados' tampoco debido a su accionar horas antes, está bien, no importaba hora.

Los ojos de la alfa se encontraban con lágrimas nuevas, despertando mediante un brinco desde la cama, su cuerpo volviendo a caer en el mismo segundo.

"Mina..." intentó hablar Taehyung, pero ella interrumpió abrupamente, sus manos en su pecho y respiración agitada.

"He hablado con mi mamá, Taehyung, la vi, la vi y hablé con ella" fueron balbuceos, pero se entendió.

Sin palabras.

Solo eso, un silencio irritante quedó en el lugar.

Kim abría su boca emitiendo cortos ruidos al no saber qué decir, su prima era reservada cuando se tratase de hablar de sus padres, la historia que les habían contado era que su madre murió cuando ella nació y su padre en una lucha con invasores tiempo después, pues, aunque el duque SeokJin estaba más que capacitado, el hecho de que 'su omega' muriera lo dejó tan débil que lo único que quería era morir.