Capítulo 14

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Volvió a la sala de estar con un pantalón de pijama junto a una camiseta algo vieja que comenzaba a quedarle pequeña, acompañado también de una toalla para que el omega pudiera ducharse.

Al llegar lo vio en el sofá con la mirada perdida, sus ojos rojos por el llanto de hace unas horas y un pequeño puchero que causó ternura en Hyunjin. Se acercó con cuidado al menor y se sentó junto a él haciendo que este volteara a verlo.

—Toma— le extendió las cosas que traía en las manos, Jeongin lo tomó—, el baño queda por ese pasillo, segunda puerta a la derecha— Jeongin asintió antes de levantarse.

Vio como el pequeño omega entró al baño rápidamente, suspiró y se levantó para ir por unas mantas y una almohada ya que al parecer esa noche dormiría en el sofá, no le molestaba en verdad, estaba muy preocupado por Jeongin y quería que estuviera cómodo. Buscó en el armario donde guardaban mantas de más y llevó todo al sofá, era amplio así que podría dormir cómodo.

Acomodó todo y volvió a su habitación para ponerse algo más cómodo, y justo cuando estaba por terminar de ponerse la camiseta sintió el aroma de Jeongin entrando a la habitación.

—Yo... muchas gracias Hyung— el mayor le sonrió.

—No debes agradecer nada, ponte cómodo yo iré a dormir al sofá. Que descanses— pero antes de poder salir sintió la mano de Jeongin tomar su muñeca—. ¿Sucede algo?— preguntó confundido.

—¿P-Podría d-dormir conmigo?— se encontraba nervioso.

—Mmm ¿estás seguro? no quiero incomodarte— el menor asintió murmurando un pequeño "por favor"—... bien.

El menor se hizo a un lado y Hyunjin se recostó en el espacio vacío de la cama, dejó un espacio entre ellos y tomó una manta para poder cubrirse.

—Que tengas buena noche.

—Igualmente, Hyung.

Ambos se quedaron en silencio, Hyunjin se recostó de forma que le diera la espalda al menor, ninguno podía dormir por más que lo intentaran. Hyunjin estaba pensando acerca de lo que comenzaba a sentir por el menor.

No creía en los destinados por más que sus amigos aseguraran que sus parejas eran sus destinados, había crecido con la imagen de sus padres peleando todo el tiempo haciendo qué dejara de creer en que una pareja podía ser feliz, y que las cosas del destino no existían, pero desde que conoció a Jeongin las cosas comenzaron a cambiar, ese niño hacía que su lobo se emocionara al verlo, que su corazón comenzara a palpitar rápidamente y que cada vez que sentía a su olor se embriagara con esa exquisita fragancia. Había pensado mucho al respecto y aceptó que aquel omega le gustaba más de lo que debería, estaba decidido a intentar enamorarlo porque sabía que aquel chico era todo lo que necesitaba. Sí, muy romántico viniendo de Hwang Hyunjin, ni él lo creía.

Le pediría ayuda a sus amigos así tuviera que aguantar las burlas de Junhui.

Sintió al pequeño chico removerse a su lado haciendo que le prestara toda su atención, se veía muy tierno durmiendo, con su nariz fruncida y su boca entreabierta. Vio como comenzó a girar en la cama entre sueños hasta estar cerca de él, el omega pasó una de sus piernas sobre las suyas atrapandolo así en un pequeño abrazo, Hyunjin estaba nervioso, su corazón palpitaba a un ritmo descomunal, se quedó quieto respirando pesadamente para poder calmar sus nervios. Pasó uno de sus brazos al rededor de la cintura del menor pegando su pecho a su espalda, no podía creer la paz que había sentido al hacer eso, de verdad iba a esforzarse con ese chiquillo.

No notó en que momento se quedó dormido, simplemente disfrutó la sensación de tener a su omega entre sus brazos.

***

𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂𝒅𝒐 [𝑯𝒚𝒖𝒏𝑰𝒏]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora