𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂𝒅𝒐 [𝑯𝒚𝒖𝒏𝑰𝒏]

Final

TW/ Contenido sexual. Si no te gusta puedes omitir hasta que encuentres los tres puntos.

El tiempo pasaba muy rápido y Jeongin ya estaba a días de entrar a la universidad.

Ya tenía más de un año de relación con Hyunjin y sentía que cada día amaba aún más a ese tonto alfa. Por esa razón quería dar el siguiente paso en la relación, quería que por fin; después de más de un año, hubiera una preciosa marca adornando su cuello y así mostrar al mundo que ya tenía un alfa al cual le pertenecía.

No lo mal entiendan, él sabe que una marca no define su relación y que a pesar de todo son destinados, así que la marca no era algo muy necesario. Pero ese fue el sueño de Jeongin desde su infancia, encontrar a su alfa destinado y que éste lo marcara, eso le daría más seguridad de que estarían juntos para toda la vida, y también era un tipo de repelente para los alfas que quisieran aprovecharse de él, ninguno es tan tonto como para meterse con un omega que tenga un lazo.

Y por eso había planeado todo para ese día, si sus cálculos no fallaban, el celo de su mayor sería este día así que no dejaría pasar la oportunidad. Ayudaría a su novio a pasar su celo para que no fuera tan malo y él obtendría la marca que lo uniría definitivamente con su alfa, dos por uno.

También sabía que su novio era un despistado cuando de su celo se trataba, así que no sospechó ni se negó cuando el día anterior el omega le había pedido que se vieran en la tarde para pasar el rato, al contrario; el alfa aceptó encantado de poder pasar un tiempo con su pequeño. La universidad mantenía muy ocupado al mayor y eran pocos los momentos en los cuales ambos podían estar juntos, sin embargo su amor se mantenía intacto, o hasta podría decirse que cada día iba creciendo más.

Jeongin tenía todo listo, le había dicho al mayor que verían una película en su casa mientras comían bocadillos y compartían algunos mimos, pero lo que Hyunjin no sabía era que todo era un truco para acabar bajo las sábanas del mayor, pero Jeongin no pensaba aprovecharse de él, le diría lo que quería y rogaba para que el mayor aceptara, porque si se negaba; a Jeongin no le quedaría más que aceptar su decisión.

Se había quedado sumido en sus pensamientos, así que justo cuando terminó de acomodar todo en su habitación; el timbre de su casa sonó, indicando que su novio había llegado. Agradecía enormemente que su madre tuviera el turno hasta tarde y así no habría nadie que los interrumpa cuando estén en sus asuntos.

Bajó rápidamente las escaleras, encaminándose hacia la puerta. Inhaló profundo para tranquilizarse antes de abrir a puerta.

Sonrió grandemente al ver a su lindo alfa frente a la puerta, dedicándole una de sus hermosas sonrisas y con un paquete de sus dulces favoritos en mano.

—¡Jinnie!— se abalanzó sobre el mayor.

—Hola bonito, ¿cómo estás?

—Muy bien Hyung, ¿y tú?— restregó suavemente su cabeza sobre el pecho del mayor.

—Bien precioso, pero ahora aún mejor porque puedo verte. Te extrañé mucho— acarició su mejilla suavemente.

—Y yo a ti, la universidad te tiene muy ocupado— hizo un puchero.

—Lo siento lindo, pero hoy soy todo tuyo— le guiñó un ojo, cosa que hizo sonrojar al menor.

—¡Yah! Tonto— ambos rieron suavemente.

Claro Yang, te sonrojas cuando es justo eso lo que quieres hacer hoy.

¡Oh cállate!

A veces detestaba a su lobo.

Ambos chicos entraron a la casa, mientras Hyunjin fue a dejar los dulces a la cocina y Jeongin cerraba la puerta con seguro.