-La agonia que tuve por perderte y por no verte otra vez, mi corazón vio como te marchaste de mi lado y te fuiste abrazos de el, aunque me toque perder... recuerdame ahora que tu piel ya no es tocada por mis manos, espero tu felicidad por y para sie...
Lan Wangji tomaba la mano fria de Wei Ying, quien aun se mantenia dormido y en un profundo sueño, en el cual el solo decidira si despertaria o no. Aun si el corazón de Lan Wangji estaba triste, no podia perder aquella esperanza de volver a tomar en un abrazo a su Wei Ying, a su esposo, a su alma gemela, el solo queria tocarlo ver esa sonrisa tan brillante que le daba todos los dias al despertarse en su cama.
Lan Wangji solo queria decirle una y otra vez lo mucho que lo amaba, lo mucho que lo queria y lo enamorado que estaba de el cada dia.
Ahora solo tenia que esperar, esperar a que Wei Ying despertara y pudiera cumplir su deseo. El sueño de ambos.—Wei Ying, el pequeño A-Yuan quiere verte... A-asi que d-despierta.—El mayor no pudo evitar que sus palabras se entrecortaran y que su cuerpo temblara con tan solo eso.
El silencio solo inundo en la habitación.
—Wangji, deberias comer algo.—Jiang Fengmian habia entrado en silencio, encontrandose a Lan Wangji perdido entre sus palabras. Se dirigio a el y lo animo.—Ve con A-Cheng, no deberias pasarte las comidas. A-Xian no querra verte asi cuando despierte.
El otro solo lo miro sin darle una respuesta.
El mayor solo asintio.—Te aseguro que me quedare con el, hasta que regreses.—Dijo el Jiang, dandole una sonrisa calida.—Ahora ve y co---
Antes de que alguno de los dos pudiera decir algo o que Lan Wangji aceptara ello, Jiang Cheng habia aparecido atras del más mayor con cara de panico y miedo.—Padre, ¡Necesita venir!, ¡Rapido!.
Jiang Fengmian tomo de los hombros a su hijo y trato de tranquilizarlo en vano.—¡¿Qué pasa?!.
Jiang Cheng se desespero y gritó.—Madre, ¡Madre se levanto de su cama, empujo al doctor y fue directo a la oficina de Lan Qingheng!, ¡Ella se entero de lo que paso!.
Tanto Lan Wangji como Fengmian quedaron en blanco.
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Yu Ziyuan estaba enojada y su furia atravesaba el limite, cualquiera que queria detenerla explicandole que no tenia que levantarse, fue fulminado con la mirada fria y de odio que ella daba.
Ella solo queria asesinar a mano fria a los que hicieron que su hijo estuviera entre la vida y la muerte, no por nada la llamaban la araña violeta, ellos conocerian quien era la señora Yu.
Claramente se habia enterado por Nie Huaisang, quien con tristeza habia lamentado que su A-Ying estuviera asi y habia sido una lastima que la familia Lan tendiera ese tipo de trampas. Pero ella no sabia nada hasta ese momento, ni su hija le habia comentado eso. De igual forma supo, que el Lan más menor, Lan Wangji no tuvo nada que ver y eso le daba puntos al mocoso.
Ahora sus pasos resonaban por todo el pasillo, aun con bata pero bien tapada decidio buscar venganza.
Tan pronto como vio la oficina del padre de Lan Wangji, entro sin tocar, dejando sorprendidos a los que estaban dentro de ahí. Sin esperar respuesta, Yu Ziyuan tomo del cuello a Qingheng quien solo la miro con panico y confusión.—¡¿Solo buscaron a mi hijo para eso?!, ¡¿Acaso querian verme la cara?!.
