🏆 3

1.3K 131 2
                                    

Ayato se sentía incómodo y muy sediento, como cada luna llena. Lanzó la pelota, pero no logró embocarla. Los chicos lo miraron, con curiosidad.

– Oye, Ayato... ¿Te sientes bien?

– ¿Por qué? –lo miró.

– Bueno...Estás jugando mal.

– ¡¿Ahhh?!

– No te enojes. Es que...estás distraído o algo.

– Es cierto. ¿Te sientes enfermo?

– Estoy bien. Déjenme en paz. 

– Uhm...Chicos, ¿Qué tal si tomamos un descanso? 

– Buena idea. 

– De acuerdo.

– ...Necesito aire. 

El pelirrojo comenzó a caminar, saliendo del gimnasio. Los chicos intercambiaron miradas, confusos ante la extraña actitud que aquel tenía ese día.

[Pasillos]

Ayato caminaba con los puños apretados, y se detuvo al ver a dos chicas del grupo de su supuesta novia.

– Oi, ustedes –llamó.

Ambas se detuvieron, mirándolo.

– Ayato-kun, ¿Sucede algo?

– ¿Han visto a Tn? 

– Uhm. Tiene que estar en la terraza. Le gusta el aire nocturno.

– Gracias. 

Comenzó a caminar de nuevo a paso apresurado, casi corriendo. Las chicas intercambiaron miradas.

– Se ve...tenso. 

– Demasiado. ¿Qué le pasará?

[Terraza]

Tn se encontraba sentada en uno de los bancos de la terraza, con las piernas sobre este; tenía sus auriculares puestos para escuchar música mientras limaba sus uñas. La puerta de la terraza se abrió, golpeándose contra la pared, y Ayato salió.

– ¡Oi, Oppai-onna!

La rubia suspiró, rodando los ojos; se quitó los audífonos, pausando la música, y lo miró mientras bajaba las piernas del banco. Fingió una sonrisa.

– Ah, Ayato~ ¿Viniste a verme? –juntó sus manos.

– No finjas ahora. Necesito... –se encogió de hombros, sonrojándose.– Ven conmigo –la tomó de la muñeca.

– ¿Ah?

El pelirrojo tiró de la chica, haciéndola levantar.

– Oye, ¿Qué demonios te-?

La giró y la abrazó por detrás, haciéndola sobresaltar y soltar un jadeo de sorpresa.

– ¿Ayato?

– Te necesito.

– ¿Qué? –levantó una ceja, sonrojándose.

– Te necesito...ahora... –pidió, mientras le desabotonaba la camisa.

– E-Espera, idiota –tomó sus manos, deteniéndolo.– ¿Qué demonios te pasa? –se separó de él y giró, mirándolo.– No soy una de tus estúpidas admiradoras o lo que sea como para que me trates como se te dé la gana.

– Tn, yo-

– No quiero oírte ahora, tengo que ir a clases.

– Espe-

Pride 🏆 Ayato Sakamaki 🐍🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora