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Habían pasados unos días desde que Inoue llegó a Hueco mundo y el grupo de Ichigo habían llegado también. Ulquiorra acaba de entrar en la habitación donde se encuentran ambas chicas.

- Al parecer han conseguido venir - dijo ___ mirando a Ulquiorra el cual simplemente la miraba

- Tú vienes con nosotros, Aizen ha decidido que estaréis separadas - dijo acercándose para soltar los grilletes de la pared - Vais a estar en distintas habitaciones, está te va a gustar ya que podrás estar sin esposas

- Con que sin esposas, supongo que habréis construido una habitación especial para mi - decía ella mientras Ulquiorra le cambiaba los grilletes por unas esposas

- En esa habitación tu reiatsu será anulado impidiendo que puedas escapar - ya le había colocado las esposas - Vamos

Empezaron a caminar ambos hacia la salida, ___ miró a Inoue y le sonrió para tranquilizarla ya que ella se veía muy nerviosa.

- Si tienes la oportunidad vuelve a casa Inoue - dijo antes de salir por la puerta de la habitación

Empezaron a bajar unas escaleras y luego recorrieron largos pasillos, estuvieron un buen rato caminando cuando llegaron a una puerta donde el espada número 8 esperaba.

- Espero que la habitación este a tu gusto, ___ Ukiwa - dijo colocándose las gafas bien

- Mientras este sin estás esposas estaré bien, gracias por preocuparte Szayelaporro Granz - dijo mirándole seriamente

- Con que sabes cuál es mi nombre, me siento agradecido por ello - dijo haciendo una pequeña reverencia

- Para ser uno de mis secuestradores eres muy amable, ¿Qué clase de experimentos quieres hacer conmigo? - el arrancar sonrió al oír eso

- ¿Tan obvio soy?

- Conozco varios científicos y tu mirada es la misma que la de ellos cuando quieren experimentar algo

- Con que otros científicos, ellos seguramente no son tan buenos como yo - dijo abriendo la puerta, entramos y me quitaron las esposas

La habitación era muy amplia, totalmente blanca y con una cama de sábanas también blancas.

- Aquí estarás hasta nuevas órdenes - dijo Ulquiorra saliendo de allí

- Si necesitas algo pulsa ese botón - dijo señalando un botón rojo que había al lado de la puerta - Ahora me voy, disfruta de tu soledad - dijo saliendo

- Tu deberías tener cuidado, a veces las cosas no salen como pensamos - dijo ella mientras él cerraba la puerta - Ahora a esperar

Se sentó en la cama y decidió que dormiría ya que no se le ocurría nada que hacer.

(...)

Se levantó de la cama al notar el reiatsu de Kenpachi junto al de Byakuya, Mayuri y Unohana. Noto como rápidamente empezaron a pelear contra algunos espadas por lo que decidió que ya era hora de actuar.

Se quitó sus dos tobilleras que actuaban igual que el parche de Kenpachi. En el instante de quitarse las tobilleras la habitación quedó destrozada al igual que el edificio en el que ella se encontraba.

- Vaya, tal vez con quitar uno hubiera válido para destruir la habitación - se colocó de nuevo las tobilleras - No quiero llamar tanto la atención, aunque supongo que ya saben que me he escapado

Empezó a usar shunpo para acercarse a donde estaba Kenpachi pero por el camino se encontró con Ikibe.

- Con que conseguiste escaparte - dijo él posicionándose delante suya

Zaraki Kenpachi y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora