-18-

247 34 26
                                    

Serena

Estoy en un momento que tengo que pellizcarme para entender las cosas.

No sé que fue más raro, encontrar un hotel en medio de la nada o que el señor "ciego" supiera mí color de pelo.

Seiya me ha contagiando , estoy comenzando a desconfiar de todos y todo a mí alrededor.

¡Osea!

¿Que más me puede pasar?

Seiya- ¡Serena, por aquí!

Me llama impaciente con su mano sacándome de mis conjeturas.

Serena- ¡Ahí voy!

Chilló colocándome casi a su lado.

Seiya- Bueno no será un palacio pero es lo que hay princesa...

Dice abriendo la puerta de la humilde habitación.

Serena- ¡No soy una princesa!

Le refutó curioseando, tiene lo básico, es suficiente para mi

Seiya- Como sea...

Murmura entrando , dejando lo poco que lleva con el en una mesita cerca del marco.

Seiya- Debes estar agotada...

Supone mirándome de reojo.

Serena- Si algo...

Respondo con el mismo desinterés que él.

¿Quien lo entiende?

Hace dos segundo me dejó hablando sola como una loca y ahora se preocupa por mí bien estar.

¡Decidase señor ciclotímico!

Imprevistamente, como hace unas horas, sin mucho tacto se acerca a examinar me con demasiado detalle.

Seiya- ¿Te duele?

Pregunta mientras puedo sentir su aliento sobre mí rostro y sus penetrantes ojos escudriñando me.
Con una delicadeza impensable toca el corte en mí mejilla que me dejó el imbécil, mentiroso y sádico de Darien.

Serena- Un poco...

Respondo cerrando mis ojos su mano desprende mucho calor.

¿Dios este hombre es una estufa, que le pasa?

Seiya- ¡Bastardo, hijo de perr!

La puerta interrumpe su insulto haciéndolo alejar se.

Thomoe- Aquí tienes lo que pediste...

Enuncia el señor dándole dos paquetes y una tarjeta dorada.

Seiya- ¡Puntual como siempre!

Este asiente con la cabeza y se va sin más.

Seiya- Toma, puedes ir a asearte si quieres...

Deja el pedido en mis manos pasando de largo.
Rajo un poco el papel y me sorprendo al ver ropa de mí talla.

¿En qué momento lo pidió?

Serena- Okey... no demoró...

Respondo caminando al único lugar de la habitación que está separado.

Entro y sin vueltas arrojó al tacho los girones que llevaba puestos.

Serena- ¡Adiós medias con calaveras!! Las voy a extrañar...

Les tiró un besito haciendo diez puntos en el cesto.
Abro la canilla el agua caliente que comienza a generar vapor.

Serena- Esto si se siente bien...

X Ella Donde viven las historias. Descúbrelo ahora