Nuestro Destino

capítulo 9

Cuenta Sam.

Dos semanas después...

Han pasado dos semanas desde ese día en la playa y los chicos tienen vacaciones pero nosotras no y tuvimos que volver a la rutina. Durante estas dos semanas hemos estado quedando después del trabajo y eso y me e acercado mucho a Flavio, no soy de confiar tan pronto pero él me está demostrando que vale la pena confiar en el.

Me sonó el despertador a las  ocho y lo apagué y me estire en la cama. Hice mis necesidades en el baño, me lave la cara y fui al vestidos a ver qué me ponía hoy. Al final decidí ponerme unos pitillos, una camiseta blanca y las zapatillas blancas y mi chaqueta vaquera, cogí mi bolso blanco para meter las llaves y eso y salí de mi cuarto. Al salir estaban las chicas en la cocina haciendo el desayuno.
-sam: hola chicas buenos días!!
- todas: hola Sam buenos días!!!
Me fui directa a la nevera y me hice una ensalada de fruta y un vaso de yogur de fresa y plátano ( por cierto es mi bebida favorita) y me dirigí a el comedor dónde estaban las chicas.
- Eva: por cierto Sam e estado hablando con Hugo y me a preguntado si nos darían unos días de vacaciones para irnos a una casa de la playa que tiene Flavio.
- Sam: pues nose pero supongo que no habrá problema de todas formas yo cuando lleguemos al trabajo pregunto y os digo.
- todas: vale ☺️
Al terminar de desayunar limpiamos todos los cubiertos, cerramos la casa y nos fuimos al trabajo. Después de veinte minutos llegamos y fuimos a fichar, después de eso las chicas se fueron a su mesa a trabajar y Sam se dirigió a preguntar lo de los días de vacaciones a lo que le dijeron que no había problema.
Al salir de trabajar les comunico a las chicas que le habían dicho que no había problema con lo de las vacaciones y Eva se lo comunico a Hugo para que pusieran fecha para comunicarlo en la empresa. Al llegar a casa Sam se fue directa a su cuarto a dormirse un rato mientras las chicas se quedaban en el salón viendo un poco de Netflix 😄.

Un rato después desperté asustada por otra pesadilla y desperte gritando y llorando, Eva entró corriendo y la abrazo sabiendo lo que pasaba pero yo  no sabía que estaban los demás ahí y Flavio me miraba triste. Después de unos  diez minutos me  tranquilicé  y decidi ducharme  y  luego salir a dar una vuelta con todos a lo que ellos accedieron.
Al salir ya arreglada los chicos se levantaron y salieron. Cuando hivamos caminando por el paseo marítimo a lo lejos divise a dos personas que esperaba no ver nunca los chicos se dieron cuenta que algo andaba mal y cuando me quise dar cuenta todo se volvió negro y solo escuchaba las voces de los chicos llamándome a lo lejos.