MIENTE (거짓말) || M.Y.G. SUGA || BTS

Capítulo veinte.

El bullicio resonaba por el pasillo del edificio generando eco, voces de personas que no podían entenderse con claridad se escuchaban por encima de la música junto con risas burbujeantes que provenían de aquel departamento. Las tres chicas se habían reunido en un pequeño círculo en el suelo con botellas verdes alrededor, en lo que debía ser la cocina, un chico sacaba vasos de las alacenas esbozando una sonrisa.

-Creí que ahora que Ara tenia novio dejaría de ser el único chico en las noches de chicas. –dejó salir una ligera risa dejando los vasos a un lado del fregadero, no hubo ninguna respuesta más que un silencio incómodo y ensordecedor. Giró a mirarlas y notó como su novia le hacía señas pidiendo que se callara.

-Ni siquiera era mi novio –Ara aclaró tristemente, habían pasado algunos días desde la última vez que había visto a Yoongi con aquella chica rubia y desde entonces tampoco habían hablado ni una sola vez. –Trae el soju.

-No queremos que la noche se arruine así que deberíamos no mencionar al chico, ni siquiera lo conocimos. –Sun dijo mirando fijamente a Ara lanzándole una sonrisa cómplice, la verdad era que sabía todo sobre el tema y aunque no conocía a Yoongi en persona, sabía bien quién era.

- ¡Yo si lo conocí! –gritó Min-suk provocando que Ara diera un respingo, quería mantener todo lo más escondido posible y la idea de que Min-suk supiera que se trataba de Yoongi le aterraba pues guardar los secretos jamás se le dieron tan bien, la miró fingiendo tranquilidad para después desviar su mirada hacia Sun. –Pero no vi su cara, tiene una silueta atractiva.

- ¡Hey! –se quejó YoungSoo, no le gustaba que su novia encontrara atractivas a otras personas, las chicas rieron un poco mirándose entre ellas. A conforme las horas pasaron y la noche fue adentrándose, los sentidos se hicieron más agudos, la música ya no sonaba tan distorsionada a pesar de usar aquella vieja bocina que YoungSoo había traído de casa, las voces y las risas se hicieron incluso más altas y ruidosas, aunque no se lograba a entender por completo lo que querían decir. La conversación se había vuelto sin sentido así que pronto se encontraron cantando a gritos mientras trataban de bailar a lo que Sun reía a carcajadas saltando de un lado a otro.

Ara se dejó caer al suelo torpemente dejando salir los últimos rezagos de su risa, la boca le sabia dulce y pegajosa, la habitación parecía girar alrededor de ella por lo que terminó recostándose en la alfombra al sentirse tan pesada, el sudor le recorría la espalda y sentía el corazón desbocado al pensar en lo que estaría haciendo Yoongi en ese momento pero solo pudo recordar en cómo se veía su mano sosteniendo la mano de aquella otra chica, la ira nació de nuevo en su pecho y creyó tratando de leer difícilmente la pantalla de su celular que era el momento perfecto para decirle al chico todo aquello que se había guardado, Yoongi tenía que escucharla aun así él no quisiera hacerlo. Sus amigos siguieron divirtiéndose un momento hasta que Sun se sentó a su lado exhausta soltando un suspiro alto.

- ¿Qué haces? –le preguntó alegremente secándose el sudor con la parte interior de su manga, la miró fijamente pero no hubo respuesta. –Ara. –golpeó con delicadeza el celular provocando que éste se balanceara sobre las manos de Ara, la chica la miró un poco molesta ante la idea del celular cayéndole en el rostro, se llevó el dispositivo hacia la oreja.

-Estoy llamando. –el alcohol le había dado el valor que no había tenido sobria, sentía la euforia corriendo por sus venas, ni siquiera estaba segura de estar llamando al número correcto, escuchó a través de la música los sonidos de la línea, pero esta no fue abierta.

- ¡Está llamándolo! –gritó Mi-suk quien ya les había prestado atención desde antes, corrió hacia Ara tratando de quitarle el teléfono, pero abandonó la idea al sentir las manos de YoungSoo sobre su cintura tratando de detenerla.