MIENTE (거짓말) || M.Y.G. SUGA || BTS

Capítulo once.

El viento dejó de soplar y el sonido del agua se detuvo a lo lejos, nada de eso era importante pues sus oídos no podían escuchar otra cosa más que sus propios pensamientos.
Su mano larga y masculina se encontraba delicadamente colocada sobre la mano de ella, mientras que la otra acunaba su rostro.
El cabello de la chica le hacía cosquillas en los dedos al bailar por la brisa tenue y él a su vez apretaba sus labios contra los de ella inmersos en un beso provocando que sus corazones retumbaran dentro de su pecho, Ara sentía los dedos fríos de Yoongi contra su piel enviándole escalofríos por todo el cuerpo pero no quería que se apartara de ella así que dejó las sensaciones atrás y se adentró únicamente en la manera en la que se sentía tener al chico tan cerca y la sensación abrazadora que emanaba el llevar puesto su saco.

La miró a los ojos mientras se apartaba un poco avergonzado, quizás besar a alguien tan pronto no estaba dentro de sus costumbres, pero era algo que no se había detenido a pensar al dejarse llevar por sus sentimientos, los ojos brillosos de la chica le devolvieron la mirada expectante y curiosa, pero al sonreír ambos decidieron implícitamente aguardar silencio.

Conforme la noche fue avanzando decidieron irse del bote, el sentía que lo que menos debía hacer era atrasar a Ara pues sabía que debía trabajar al día siguiente en su nuevo puesto de ascenso. El regreso en coche a casa de la chica fue silencioso, pero eso no lo hacía necesariamente incómodo, sus manos seguían juntas mientras sus cuerpos se tocaban al estar uno junto al otro en el asiento trasero, ya no se les hacía extraño el sentirse tan cerca pues algo en ellos había cambiado durante la tarde.

Cuando llegaron a los edificios en dónde se encontraba el departamento de la chica ambos bajaron. Yoongi la acompañó hasta la puerta de su departamento titubeante, el pasillo con luz artificial resonaba con forme avanzaban por él, ella abrió la puerta y luego se giró un poco para mirarlo, pero sin darle tiempo para decir otra cosa el chico volvió a acercarse a su rostro besándola nuevamente, ella entrelazó sus manos por detrás de su nuca jugando un poco con su cabello causándole cosquillas. Cuando se apartó se despidió por lo bajo y luego regresó por el pasillo hacia la calle dejándola de pie en la puerta abierta de su departamento, el corazón le latía fuertemente mientras se dejaba caer sobre el asiento trasero del coche.

"...Claro que ver a Yoongi en la ciudad de nuevo es sorprendente debido a que principalmente no debería estar aquí, más cuando lo encuentras en un bote junto a una chica desconocida. ¿No deberían estar dando un concierto? Al parecer hay cosas más importantes que eso ahora a solo unas horas de vuelo. Hasta ahora sabemos que se va ésta noche nuevamente y les dejamos el hotel en dónde sabemos que probablemente se encuentre, pero ¿la chica? Probablemente para cuando tengamos información ya no sea importante. "

Dejó caer el celular a un lado de él, emitió un quejido ronco antes de sentarse sobre la cama. Era su ultimo día libre y había decidido pasarlo solo al menos la mayor parte, pensó en avisarle a Ara sobre el post en aquel blog, pero tampoco quería alarmarla pues en todo caso él podría lidiar con eso después. Pasó una mano sobre su cabello alborotado tapándose también los ojos de la luz radiante de la ventana y volviendo a tomar su celular decidió mensajear a la chica.

12:40 Suga:
¿Comemos juntos?

Miró la pantalla esperando una respuesta inmediata tocándose la orilla de los labios con la yema de su dedo índice en un acto distraído, entonces recordó la manera en la que se sentía besar a Ara. Repitió en su memoria la imagen de ella en contra del viento con su cabello volando y desprendiendo motas invisibles de aroma, sus ojos brillosos como estrellas y el rostro que hacía mientras lo escuchaba atenta como una niña a un cuento. Sin notarlo se encontraba sonriéndole a un recuerdo que probablemente no dejaría de pensar tan fácilmente. Se puso de pie frente a la ventana y miró como la luz radiante del sol inundaba las calles de Seúl, hacia tanto que no ocupaba un momento para ver los detalles de las cosas, ni siquiera recordaba cuando había sido la última vez que había salido a caminar por el parque a tomar el aire fresco como cualquier ciudadano.
El estómago le rugió debido al hambre a lo que se sobó la barriga por encima del camisón del pijama antes de dirigirse al baño a tomar una ducha, en unas horas tendría un vuelo por tomar, pero antes esperaba poder ver a Ara. A lo lejos se podía escuchar el agua correr por el desagüe mientras en la cama sonaba una notificación de un mensaje nuevo.