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Aizawa Pov's

Sus labios impactaron contra los míos antes de que terminase lo que iba decir, no podía apartarme, no...mi cuerpo no quiere apartarse. Moví mis labios e intensifiqué el beso, joder. Esta niña será mi ruina. Ella es muy buena en esto joder, después de varios segundo o minutos, no lo sé la verdad. Nos apartamos y ella me miró con una orgullosa sonrisa.

— Estás castigada Yure— le sonreí aún más orgulloso.

—¿Qué? ¿No te gustó? Joder que mierda, no sé cómo pensé que tal vez te llegaría a gustar— se veía triste.

—Sí me gustó Yure, pero has besado aún profesor y eso no está bien. Lo sabes...¿yo te gustó— pregunté incrédulo.

—¿Qu- qué? Yo esto...ah— sus mejillas estaban coloradas, es una respuesta obvia.

— No sigas, aunque yo te gusté. Tú a mí no me gustas. A parte de que lo nuestro es imposible— salí de mi despacho sin dejar que diga ninguna palabra, sería horrible que yo también me enamoré de ella y eso no estará en mis planes.

Yure Pov's

Aizawa salió del despachó sin dejarme decir nada, salí de su despacho y me dirigí a mi habitación. No me apetece ni comer...
Como era la hora de comida, todos estarán en el comedor, incluso Aizawa. Decidí dar un paseo por la casa en vez de ir a mi cuarto, las lágrimas recorrían mis ojos y cuando bajaba las escaleras me tropecé pero alguien me sujetó.

—Cuidado maldita extra— Bakugou...

—Lo siento mucho— me incorporé, me alejé un poco y miré a otro lado para secar mis lágrimas con la manga de mi uniforme.

—¿Estás llorando extra?— me miró con su mirada penetrante.

—Claro que no rubia— le sonreí.

—Cámbiate, ¿no? ¿O seguirás con la ropa de entrenamiento?— se burló de mi.

—Tienes razón, debería cambiarme— me di la vuelta para subir a mi cuarto pero su mano en mi brazo me lo impidió—. ¿Qué ocurre rubia explosiva?— me burlé riéndome.

— Quiero... quiero que cantemos una canción juntos, si te gusta me dejaras unirme a vuestra banda— puso su sonrisa retorcida.

—¿Qué banda...?— aún no somos una banda con los chicos y Jiro—. Esta bien, pero todavía no somos una banda— le sonreí.

Subimos a mi cuarto, Bakugou esperó con tranquilidad hasta que yo le cambiará, le invité a pasar cuando había terminado de cambiarme, me puse un pantalón vaquero negro y una sudadera negra que me quedaba bastante grande. Me dió la letra y la estuvimos enseñando un rato, cuando ya terminamos decidimos cantarla entera.


Puse el soundtrack por los instrumentos que no tocaríamos. Al principio la canción era muy tranquila, él estaba sentado en la batería y yo tenía una guitarra, casi por la mitad de la canción él empezó con la batería y yo le seguí con la guitarra. Nunca pensé que Bakugou tocaría, tampoco pensé que cantara tan bien. Sentía que mi cuerpo ardiera, la sensación era demasiado, nos miramos y nos sonreímos. La canción termina con mi voz, ambos estábamos sudados. Dejé la guitarra en el suelo mientras Bakugou se levantaba de la silla de la batería.

—Eres increíble Bakugou— me tiré a él abrazándole, para mí sorpresa él no se alejó simplemente me rodeo con sus brazos por unos segundos antes de separarse.

Te amo pesado (Aizawa Shota)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora