II

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No me lo podía creer, All Might había impactado contra el edificio y lo había dejado casi destruido. Un villano lo había lanzado, yo corrí hacia él por un estúpido impulso y le ayudé a incorporarse. Él me miró sorprendido y me reconoció en seguida, se veía agotado.

Sin decirme nada salió corriendo a por ese villano, para ser All Might vi que le costó un poco derrotarlo...pero lo consiguió. Al terminar se dirigió a mí, yo seguía observando por el gran agujero que había dejado eso en mi casa. Vivía en un piso, la mitad del edificio estaba en ruinas.

—Joven Yure, ¿vives aquí?— Dijo algo sorprendido.

—Bueno sí, pero ahora mi casa está destruida— no tengo más palabras...

— No sabes cómo lo siento joven, ¿vives sola?— Asentí levemente—. ¿Tienes familia cerca?—Negué con el rostro—. Vaya...yo lo siento— le interrumpí antes de que siguiera hablando.

—No pasa nada, no es tu culpa. El villano te atacó haciendo que cayeras aquí— le sonreí aunque seguía algo desconcertada.

—Hablaré con la academia para que te brinde un hogar mientras reconstruimos el edificio— Dijo algo cansado y vi que le salía humo del cuerpo, extraño...—. También a tus vecinos del edificio no te preocupes— Empezó a reír con su risa característica, y le sangro la boca.

—Esto, señor All Might, ¿se encuentra bien?— Dicho esto se convirtió en un hombre un poco más bajo y flaco, estaba alucinando—. ¿Tú eres....?— Él tenía cara de sorprendido.

—Lo siento, vayamos a otro sitio, dame un momento— Dicho esto sacó su móvil del bolsillo de su pantalón.

Se dirigió a la salida mientras hacía una llamada, yo le seguía.

Llamada

—Hola Aizawa.

—Toshinori, ¿qué ocurre?

—He tenido un problema— suspiró.

—¿Qué hiciste ahora?— se le escuchó suspirar y maldecir detrás de la línea.

—Estaba peleando con un villano y caí en casa de una alumna, destroce todo un edificio— estaba triste por lo ocurrido—. Bueno, me harías el favor de buscar un edificio temporal para esta alumna y los inquilinos del edificio, por favor— Aizawa se quejó pero aceptó.

—Esta bien, mándala a mi casa y diles a los demás que vengan con ella, gracias el edificio en el que vivo es de un amigo. Seguro no le importa.

—Muchas gracias Aizawa.

Fin de la llamada

All Might me explico lo que le ocurrió en el pasado, por eso tiene poco tiempo de transformación. También me comentó lo que había dicho Aizawa-sensei, mis vecinos que se encontraban fuera del edificio, recogimos todos algunas cosas antes y después me siguieron con la dirección que me dio Toshinori Yagi. El verdadero nombre de All Might, al llegar vimos a Aizawa, digo Eraserhead. Por suerte éramos muy pocos en ese edificio, solo éramos cinco personas.

Él entregó las llaves, y todos con las pocas cosas que habían traído se dirigieron a su casa temporal. Era solo hasta que arreglaran nuestro edificio. Me acerqué al profesor este me miró de arriba a bajo, en este momento recordé que solo llevaba el pijama. Que avergonzada me siento.

—Venga vamos— empezó a caminar y yo le seguí sorprendida, a mí no me dió llave...

Subimos por el ascensor hasta el tercer piso, entramos por la puerta y un pequeño gatito negro con una mancha blanca en el ojo nos recibió. Saltó a mis brazos haciendo que la bolsa de cosas que traje se cayeran al suelo.

—Lo siento, normalmente no hace eso con las visitas— Mi profesor intento quitármela pero él gatito clavo sus uñas en el pijama pasando su cabeza por mi mejilla, me estaba saludando—. Chiu despegate—. Él al ver que el gato no quería recogió la bolsa que se me había caído. Sé quito los zapatos y se adentró a su morada, yo en cambio sujeté al gatito que aunque estaba bien agarrado me da miedo que se caiga. Pasé siguiéndole.

—Es bonita tu casa Aizawa, ¿me quedaré aquí?— pregunté mientras él me guiaba a una habitación.

—Sí, hemos decidido que es más seguro para ti— Abrió la puerta de la habitación, era muy él. Tenía una cama de matrimonio, dos mesillas de noche a cada lado de está, un escritorio con una silla y un armario empotrado. Lo que me sorprendió es que las puertas de los armarios eran espejos—. Dormirás aquí, enfrente está el baño— su expresión seria no cambiaba.

—Gracias, sensei—Le sonreí y me miró indiferente.

—¿Ya cenaste?— Asentí—. Vale duerme bien.

Salió de la habitación dejándome sola, yo me acomode en la cama. Y pensé en todo lo que me había pasado este último años, mi primer día de clase no estuvo mal pero mi casa...Sin más me dormí.

(...)

Me desperté con los rayos de sol dándome en la cara, no es nada agradable. Decidí levantarme pero pisé algo, es Aizawa en su saco amarillo, él soltó un gruñido.

—Dios mío, lo siento mucho sensei— dije después de quitarme rápido.

—¿Qué más da? Lo hecho ya está hecho, Yure— suspiró y salió del saco—. Vamos a desayunar anda...— Se dirigió a la cocina y le acompañé.

—Sensei, ¿quiere que haga yo el desayuno?— Él se quedó pensativo.

—Está bien, pero no tengo gran cosa en la nevera— puso la cafetera.

—Esta bien, ¿le gusta mucho el café?—Sí, soy muy preguntona, siempre me lo dicen.

Él solamente asintió, yo abrí la nevera saque pescado. Lo hice a la plancha con un poco de arroz que encontré en el armario, lo serví y lo puse en la mesa. Saqué una botella de agua de la nevera e hice todo esto bajo la atenta mirada de Aizawa. Cuando ya terminé todo fui a sentarme en la mesa pero tropecé con el aire y caí encima de mi profesor.


—Yo...yo...¡lo siento mucho!— estaba sonrojada y vi también un pequeño rubor en sus mejillas.

—Sí, sí pero levántate de una vez— me levanté rápidamente y me senté en la mesa. Él hizo lo mismo.

Después de una pequeña mañana agetreada nos dirigimos juntos a la UA. En la entrada me encontré con Todoroki se me hizo extraño ya que me habló por primera vez.

Te amo pesado (Aizawa Shota)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora