XV

569 91 37
                                    

—¿Jaemin? Ah... Que dolor de cabeza... ¿Qué quieres?— Preguntó el mayor a través del teléfono. Debía haberle despertado yo. No me sentía mal, era casi la hora de comer.

Aunque, siendo justos, yo acababa de despertarme también y todavía estaba descansando en la cama de Jisung.

—Despiértate del todo, tengo que preguntarte algo.— Dije, y logré captar su atención. Escuché sábanas moviéndose y al chico estirándose.

—Dime.— Dijo, aclarando su voz. Por su tono de voz parecía preparado para recibir un disparo incluso. Era como esa voz que ponían los concursantes de los programas de televisión antes de la pregunta que les daría la victoria. Con miedo, pero decididos.

—Verás, resulta que nuestro querido Jisung nos tenía algo bien escondido, no sé si tú lo sabes...— Empecé diciendo, al menor no le habían gustado nada mis palabras, y me hizo un gesto para que me callara. Renjun hizo un sonido que bien podría significar que continuara, o que todavía estaba estirándose. Sea cualquiera de los dos, yo continué.— Resulta que el pequeño ha estado tonteando con Chenle, hasta les vi besándose ayer, ¿qué te parece? Al final tenías tú razón.— Dije. Jisung trató de quitarme el móvil, pero no logró nada además de que me levantara de la cama para que no me lo arrebatara.

—¿Eh? Ah, sí, ya lo sabía. Si ya te dije que soy como Cupido.— Respondió después de unos segundos. Junto a sus palabras, iban algunas risas que me resultaron algo forzadas. Conocía bien la risa de mi amigo, y no era esa, pero supongo que igual esta conversación por teléfono era un poco extraña, no estaba seguro. Decidí ir al punto.

—Bueno, lo que iba a decirte con eso. ¿Qué te parece si vamos a comer los cuatro? Ya sabes, nosotros y esos dos.— Casi se me escapa decir aquello de "cita doble", pero, por suerte, me di cuenta a tiempo de que no era nada apropiado decirle eso a un amigo. Tenía que intentar acercarme a él discretamente, no ir y pedirle una cita.

—¿Comer con ellos? ¿Para qué?— El chico parecía nervioso. Hizo el mismo efecto en mi, ya que me llevaba a preguntarme por qué estaría él nervioso con esa propuesta. Ahora tenía que pensar en una excusa, rápido.

—Pues para preguntarles sobre su relación, ya sabes, que tengan una cita y que se formalicen un poco. Podemos ayudarles un poco, además de ser una comida de celebración para que duren mucho y sean muy felices, ya sabes.— Dije. Tal vez sonaba un poco forzado, pero era lo mejor que podía decir.

—No sé si van tan en serio...— Respondió, dudando sus palabras por su entonación.

—No digas eso, que eras tú el que quería emparejarlos desde un principio.— Argumenté. Jisung, a mi lado, hacía ya un ratito que se había rendido intentando que me callara o quitándome el móvil de la mano; no le servía de nada.

—Bueno, pero esto tal vez sea pasarse, no estoy seguro.— Dijo. Ya me había dejado claro que no quería hacerlo, pero, aún así, insistí.

—No nos pasaremos, es solo una comida, no tenemos por qué decir nada acerca de ellos. Vamos, será divertido, una comida entre amigos.— Le pedí. A este punto se podría decir que le estaba suplicando, incluso. Renjun suspiró.

—Está bien, tienes razón. Será divertido, sin conversaciones raras ni incómodas. Dile a Jisung que avise a Chenle, supongo. Nos vemos mañana. — Respondió, y colgó directamente. Pues al final no había sido tan complicado.

No tendría por qué haberlo sido en un principio, en realidad, no me esperaba que el mayor me objetara tanto en cuanto a comer todos juntos mañana, pero supongo que se preocuparía por los dos chicos y no querría ponerlos en una situación así, donde nosotros dos probablemente estaríamos haciendo comentarios sobre qué tipo de relación tenían y esas cosas. Estaba seguro de que después de esto no se nos ocurriría decirles nada, a no ser que el tema surgiese.

𝓁𝑜𝓋𝑒 𝒸𝑜𝒸𝓀𝓉𝒶𝒾𝓁 ~ 𝓃𝑜𝓂𝒾𝓃 𝒻𝒶𝓃𝒻𝒾𝒸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora